Un legado fundamental que las madres y padres de familia heredamos a nuestros hijos son aquellos valores que aprenden de nosotros, los cuales serán -a su vez- transmitidos a las futuras generaciones. Las virtudes que consideramos idóneas dependerán de la época y el tipo de sociedad en que vivimos.
Para tener más claridad sobre el tema, en una encuesta mundial de valores se preguntó a ciudadanos de los cinco continentes cuáles eran las cualidades que consideraban que debían ser inculcadas a la niñez. Los mexicanos encuestados consideraron que las siete más valiosas son, en orden de importancia: respeto y tolerancia, responsabilidad, obediencia, generosidad, independencia, laboriosidad y fe religiosa, mismas que fueron ya descritas en la primera y segunda partes de esta serie.
Los paisanos encuestados como parte de este estudio jerarquizaron en octavo lugar el hábito del ahorro; en noveno, la fuerza de voluntad; en décimo, la imaginación, y en undécimo, la autoexpresión.
HÁBITO DEL AHORRO. Si enseñamos a los pequeños a ahorrar, valorarán la importancia de guardar una parte de su “domingo” una vez satisfechas sus necesidades básicas. Aprenderán a no caer en hábitos consumistas, así como a cuidar el agua y demás recursos naturales en pro de la ecología. El 34 por ciento de los mexicanos encuestados catalogó este hábito como muy importante, a diferencia de los sudcoreanos y los japoneses, quienes lo valoraron más que nosotros (65 y 47 por ciento, respectivamente).
FUERZA DE VOLUNTAD. Se dice que una persona posee esta condición cuando afronta un reto personal con determinación, haciendo gala de su fortaleza interna. Si transmitimos este valor a niñas y niños, los blindaremos ante la falta de ambición y la pereza, pues no se dejarán vencer por las adversidades. El 27 por ciento de los mexicanos consideró sumamente importante esta cualidad, si bien los japoneses y los alemanes la tienen en mayor estima (67 y 59 por ciento, respectivamente).
IMAGINACIÓN. Es la capacidad de visualizar situaciones, ideas o pensamientos en la mente y asociarlos con elementos reales. Si a pequeños y pequeñas se les estimula a desarrollar su potencial creativo, podrán hacer uso de él en el terreno artístico y aplicarlo a la resolución de las situaciones y problemas de la vida cotidiana. El 23 por ciento de los paisanos encuestados la considera altamente relevante, al igual que brasileños y españoles (24 por ciento). La valoran aún más los australianos (40 por ciento), los japoneses (31 por ciento) y los estadounidenses (30 por ciento).
AUTOEXPRESIÓN. Este valor se refiere a la capacidad de manifestar nuestro ser interior a través de nuestras acciones. Niños y niñas deben comprender que cada una de sus palabras y expresiones corporales revela el tipo de persona que son y la manera en que deben relacionarse con otros. El 18 por ciento de los mexicanos tiene esta virtud en alta estima, si bien en estas tres naciones se le valora aún más: Corea del Sur (50 por ciento), Polonia (41 por ciento) y Alemania (39 por ciento).
Bibliografía: http://www.worldvaluessurvey.org, https://definicion.mx.
