A esto se suma la complejidad de aquellas mujeres que trabajan y no tienen con quién dejar a sus hijos, pues en sus centros de trabajo no les permiten llevarlos con ellas
La nueva forma de educar a los hijos en casa ha tenido un impacto mayor en las mujeres que en los hombres, pues la carga de trabajo para las mamás ha incrementado considerablemente, exigiendo más labores en el hogar. A decir de la activista feminista Maricruz Ocampo Guerrero, la maternidad se plantea como obligada y la paternidad como una opción o un apoyo a la mujer.
“La pandemia nos ha demostrado que ha perjudicado más a las mujeres y este regreso a clases, la forma en que está planeado, es un ejemplo de ello. El tema del cuidado de los hijos se ha delegado a las mujeres de manera tradicional, sin una razón fundada más que en el hecho de que son mujeres; sin embargo, ahora están teniendo que hacerse cargo del trabajo, dar clases, el cuidado de la casa, de los hijos, del cuidado de los enfermos en sus casas, etcétera… Entonces, ha aumentado impresionantemente la carga de trabajo”, señaló.
A esto se suma la complejidad de aquellas mujeres que trabajan y no tienen con quién dejar a sus hijos, pues en sus centros de trabajo no les permiten llevarlos con ellas; o aquellas que hacen ‘home office’ y se ven obligadas a atender absolutamente todo lo que sucede en el hogar, o bien, que muchas mujeres trabajan en la informalidad.
En este contexto, Maricruz Ocampo expuso que existe una falta de atención a estos temas, al generar políticas públicas que, además, no están atendiendo el impacto que la contingencia tiene directamente contra este sector.
Desde el aspecto social, dijo, también se está dejando de lado la crianza responsable por parte de los hombres.
