Durante el primer semestre de 2022, el Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación y el Estado Laico impulsará en el Congreso Local la iniciativa de cambio de identidad de género
Waltter López González, vocero del Frente Queretano por el Derecho a la No Discriminación y el Estado Laico, indicó que la organización cuenta con una agenda que trabajarán durante el primer semestre de 2022 con algunos de los diputados que conforman la 60 Legislatura, ya que hay iniciativas que por tercera ocasión serán presentadas ante el Congreso Local.
“Trabajaremos los temas pendientes, como la iniciativa de cambio de identidad de género, que ahora sería la tercera ocasión que se presenta: la primera vez, en la 58, con el PRI; en la 59, fue a través de Morena, y ahora estamos buscando diferentes interlocutores, que ya tuvimos un primer acercamiento con la diputada de representación indígena, Yasmín Albellán Hernández”.
En ese sentido, el vocero dijo que tiene conocimiento de por lo menos 293 personas queretanas que han hecho su cambio de identidad de género fuera del estado, proceso en el que también se contemplan modificaciones a documentos oficiales, como la credencial para votar que emite el Instituto Nacional Electoral (INE).
“O sea, no estamos hablando de millones de gentes, pero el cambio de identidad de género para la población trans les abre el camino para, por ejemplo, estudiar y trabajar sin discriminación, porque se alinea su identidad de género con sus documentos, cosa que ahorita no sucede”.
Agregó que otra de las iniciativas que impulsarán será la prohibición de las terapias de conversión, tras lamentar que estas acciones se realicen entre la población más vulnerable como niñas, niños y adolescentes que todavía están bajo la patria potestad de sus padres.
“Los padres se enteran o descubren la orientación sexual o identidad de género de sus hijas o hijos, y bajo el lema de querer lo mejor para ellos, pues, caen, en la mayoría de las veces, con charlatanes que aparte de que les cobran dinero, les prometen algo que no puede ser, como el corregir la identidad de género o su orientación sexual, y en ese proceso hay desde violencia psicológica hasta torturas físicas”.