El especialista en derecho internacional José Carlos Rojano Esquivel, lamentó la respuesta del gobierno de la República, ya que, este, incluso, llamó “borregos” a los diputados europeos
La petición que hizo el Parlamento Europeo al Gobierno de México para que garantice la protección y creación de un entorno seguro para periodistas y defensores de derechos humanos no es intervencionista ni injerencista, pues la Unión Europea nunca instruyó al gobierno federal qué y cómo hacerlo.
Así lo consideró el especialista en derecho internacional José Carlos Rojano Esquivel, quien lamentó la respuesta del gobierno de la República, ya que, este, incluso, llamó “borregos” a los diputados europeos, toda vez que, a través de un comunicado, señaló que se suman a la estrategia “golpista del grupo corrupto” que se opone a la Cuarta Transformación.
Sobre el comunicado, José Carlos Rojano manifestó: “No hay que confundir este comunicado (…) y hay que distinguirlo de una Nota Diplomática de Protesta, que también es otra vía a que tiene México derecho a manifestarse, si es que le incomodó el pronunciamiento del Parlamento Europeo, y usar los mismos canales que ofrece el derecho internacional”.
Mencionó que el comunicado es una publicación con un trasfondo político que va dirigida a los partidarios del gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
“La forma es fondo. Hay un artículo 89 constitucional, fracción 10a., hay tratados y creo que aquí el presidente es incongruente, es irrespetuoso cuando está citando el respeto al derecho, eso es incongruente, contradictorio”, sostuvo.
Recordó que México, a finales de los 90, firmó un Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea. Para tales efectos, refirió, se le solicitó suscribir la cláusula democrática, que implica incrementar los niveles de democracia efectiva y velar por los derechos humanos.
“El tema de los derechos humanos (…) es un tema que rebasa su soberanía, de ahí que, de acuerdo con los canales internacionales, existen diversos instrumentos para salvaguardar tales derechos”, dijo, para luego indicar que el Parlamento Europeo utilizó una herramienta política para emitir su declaración.