Durante un desfile militar, el líder supremo de Corea del Norte, Kim Jong-Un, advirtió a Occidente que el país comunista ampliará su capacidad armamentística nuclear “a la mayor velocidad”
El líder supremo de Corea del Norte, Kim Jong-Un, ha dicho durante un gran desfile militar celebrado en Pyongyang que ampliará la capacidad armamentística nuclear “a la mayor velocidad”, según medios estatales norcoreanos citados por la agencia sureña de noticias Yonhap.
Kim hizo hincapié en que el país asiático se preparará de manera exhaustiva para poder emplear la disuasión nuclear en cualquier momento y advirtió que cualquier fuerza extranjera que busque una confrontación militar “dejará de existir”.
“Nuestra misión esencial es disuadir para evitar un escenario de guerra pero no podemos permitir que nuestras armas nucleares se limiten solo a prevenir una guerra esperando a que se genere una situación que deseamos no ver nunca en esta tierra”, añadió Kim.
El discurso tuvo lugar durante un gran desfile militar que se celebró para conmemorar el 90 aniversario de la fundación del Ejército de Corea del Norte y en el que, a falta de que los medios norcoreanos publiquen imágenes, se cree que participaron unos 20 mil efectivos y cientos de piezas de armamento, incluyendo misiles balísticos, según lo captado por los satélites.
Los analistas esperaban que el desfile se celebrara en torno a la medianoche del domingo al lunes, aunque la lluvia que cayó en la capital norcoreana al parecer obligó a aplazarlo.
Fuentes cercanas al asunto ya adelantaron a la agencia Yonhap que el desfile arrancó en torno a las 22:00 del lunes 25 de abril.
El aniversario llega en un momento en que Corea del Norte, que sigue totalmente aislada del exterior por la pandemia, está realizando un número récord de pruebas de armas, incluyendo la primera de un misil balístico intercontinental (ICBM) en cinco años, de cara a completar un programa de modernización armamentística aprobado el año pasado.
A su vez, los satélites llevan semanas captando preparativos para lo que se cree que será la primera prueba nuclear de Pyongyang desde 2017.
En Corea del Sur, que viene respondiendo a su vez con el desarrollo de nuevos activos armamentísticos, asumirá el poder en dos semanas su nuevo presidente Yoon Suk-yeol, que ha prometido mantener una actitud menos tolerante con la nación comunista.