Rusia aprobó un proyecto de ley que equipara a la traición y recrudece el castigo para los militares que se pasan al bando enemigo, en situación de guerra
La Cámara baja del Parlamento ruso aprobó hoy un proyecto de ley que equipara a la traición y recrudece el castigo para los militares que se pasan al bando enemigo en situación de guerra.
Además el proyecto incluye la responsabilidad penal por la participación de ciudadanos rusos en conflictos ajenos a los intereses de Rusia, según informó el Legislativo ruso en un comunicado.
La nueva norma prevé una enmienda a la legislación actual con el objetivo de calificar como alta traición el paso de militares rusos al bando enemigo durante un conflicto armado o acciones militares en contra de Rusia.
Este delito podría implicar penas de hasta 20 años de cárcel.
La propuesta de ley fue presentada por diputados por el partido oficialista Rusia Unida y rescata normas de la legislación penal soviética.
“Cuando redactaron el Código Penal ruso eliminaron este artículo, desconozco por qué motivos”, declaró el diputado Ernest Valéev, citado por la agencia rusa Interfax.
El diputado añadió que este proyecto de ley busca subsanar este error y considera un sinsentido que la actual legislación penal no prevea castigos por traicionar a la Patria.
Valéev señaló que la pena será la misma que la existía en la legislación soviética.
Además, se castigará con penas de 12 a 20 años o multas de hasta 500 mil rublos (8,800 dólares) “la participación de ciudadanos rusos en un conflicto armado o acciones militares en contra de los intereses de nuestro país en caso de ausencia de indicios de alta traición”.
El proyecto también extiende la responsabilidad penal por la participación en organizaciones declaradas en Rusia indeseables en terceros países, una norma que anteriormente se limitaba al territorio ruso.
Además, se penará “la cooperación confidencial con servicios secretos de estados extranjeros”, lo cual podría conllevar a penas de cárcel entre 2 y 8 años y multas de hasta un millón de rublos (17 mil 500 dólares).
Los castigos ascenderán a penas de cárcel de 10 a 20 años a quienes recopilen, roben, almacenen o entreguen informaciones al enemigo que puedan ser utilizadas en contra de las Fuerzas Armadas de Rusia en una situación de conflicto armado.
También se penarán las actividades en contra de Rusia que obstaculicen el trabajo de las autoridades o funcionarios dirigidas a garantizar la seguridad del país, por lo cual se impondrán multas entre 100 mil y 500 mil rublos (1,700-8,800 dólares).
En caso de que este tipo de acciones se lleven a cabo por un grupo de personas por previo acuerdo, por medio de un abuso de poder o por medio de medios de prensa o internet, la multa será de 300 mil rublos a un millón de rublos (5,300-17,500 dólares).
La sanción se recrudecerá aún más si a las anteriores condiciones se le suma el uso de la fuerza, lo cual será penado con entre 5 y 7 años de cárcel y con multas entre los 500 mil y 2.5 millones de rublos (8,800-44,000 dólares).
El nuevo proyecto también recrudece las penas para los rusos que participen como mercenarios en conflictos bélicos, y que estipula penas de cárcel de 7 a 15 años.