Tras el pedido de prisión de la fiscalía, Cristina Fernández aseguró que no existen pruebas en su contra y que ninguno de los citados a declarar durante el juicio apoyó la versión de los fiscales
El juicio oral al que es sometida la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, por presuntas irregularidades en la concesión de obras públicas durante su gobierno (2007-2015), afronta hoy el inicio de la fase de alegatos de su defensa.
El ataque sufrido el jueves por la también exmandataria a las puertas de su domicilio en el barrio capitalino de Recoleta marca la nueva fase de este juicio, en la que deben comparecer los acusados ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 2 de Buenos Aires.
Los abogados de Fernández deberán presentar los alegatos de su defensa dentro de dos semanas; por el momento, el que fuera presidente de la Administración General de Vialidad de la provincia de Santa Cruz de 2005 a 2006, Héctor Garro, será el primero en comparecer.
La fiscalía había pedido tres años de prisión en suspenso por presunta administración fraudulenta para Garro, que se hará presente físicamente, mientras que el resto de los involucrados en la causa seguirá la audiencia por videoconferencia.
El juicio oral se reanudará en medio de un contexto diferente tras el atentado contra Cristina Fernández, para quien los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidieron 12 años de prisión y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.