Poner al centro los cuidados para garantizar una movilidad accesible y universal, a partir del paradigma de la “ciudad cuidadora”, es decir, de una ciudad segura para las personas que realizan labores del hogar y de cuidados no remunerado
Lorena Suárez Álvarez, además de ser investigadora de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y fundadora del colectivo Cuidanda Querétaro, es madre. Hacer trayectos con su bebé por el transporte público o por las calles de la ciudad le resulta “peligroso”: sin infraestructura adecuada, poca iluminación, banquetas no óptimas para transportar la carreola de su hijo y la presencia de un transporte público con alta saturación.
Por ello, su investigación doctoral se centra en la movilidad del cuidado, ya que el 74.8 por ciento de las horas destinadas a las labores del hogar y cuidados no remunerados es aportado por las mujeres, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); además, en México, las mujeres realizan 10 millones de desplazamientos diarios, de los cuales el 74 por ciento se efectúan en el transporte público, de acuerdo al Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
La doctorante en Innovación, Tecnología y Hábitat explicó que la movilidad del cuidado, según la definición de la organización internacional Oxfam, tiene que ver con las condiciones en que las mujeres realizan los trayectos para resolver las necesidades de los cuidados y del hogar.
“Cuando trasladamos estas labores de cuidado al espacio y al territorio, la movilidad resulta determinante. Es importante y pertinente hablar de la movilidad de cuidado porque las mujeres realizamos la mayor parte de estas actividades a la hora de trasladarlo al territorio”.
Para la académica es muy importante poner al centro los cuidados para garantizar una movilidad accesible y universal, partir del paradigma de la “ciudad cuidadora”, es decir, de una ciudad segura para las personas que realizan labores del hogar y de cuidados; además, subrayó fundamental entender los usos sociales y los cuidados desde la diversidad de necesidades y experiencias.
“Tengo a mi bebé y es impresionante que no te puedes mover a ningún lado en carreola, las banquetas están fatales, hay hoyos, muy poca iluminación, de pronto la banqueta se acaba y debes meterte a la calle y es súper peligroso y ahora en un camión atiborrados de gente; y además de carreola piensas en personas que van en sillas de ruedas.”
Explicó que la perspectiva de género, vinculada al estudio de lo urbano, se propone a fin de priorizar en los procesos de diseño las experiencias humanas desde la diversidad de las personas usuarias y sus usos sociales.
“Es pensar la ciudad no solamente desde una persona que trabaja, sino desde una personas que el día de mañana deja a los niños a la escuela, pasa al mercado a comprar comida, va a la farmacia, pasa a recoger unos zapatos que dejó para que los arreglaran, regresa casa y luego vuelve por los niños”.
Por su parte, Triana Zepeda, arquitecta con especialidad en diseño sustentable e integrante del colectivo Transeúntas, explicó que para construir ciudades más seguras, se tienen que diseñar políticas públicas en movilidad con perspectiva de género.
“La movilidad desde una perspectiva de género implica analizar cómo esos roles influyen en el uso y disfrute de nuestras ciudades. También cómo el género y su interacción con otras características como edad, origen y el nivel de ingresos, condicionan y determinan la movilidad como personas”.
Apuntó que las desigualdades sociales y económicas, al cruzarse con las diferencias de género, limitan el tránsito en la ciudad, por lo que recalcó la necesidad de impulsar proyectos urbanos que no prioricen únicamente a los automóviles, sino desde el género y el cuidado.
“Querétaro no es una ciudad para nada incluyente en el tema de movilidad y se presenta este escenario contradictorio en donde se nos restringe la libertad y las experiencias en el entorno”.
La académica en Ciudad y Espacio Público por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), explicó que un mejor diseño de movilidad tiene que considerar recorridos útiles y multimodales, en donde se apoyen en las tareas del cuidado.
“Esto significa que la movilidad debe incluir un sistema de movilidad cotidiano e integral, que no responda ni privilegie a la movilidad laboral o en carro”.
Dijo que se deben incluir mobiliarios para el descanso y el cuidado, baños públicos para que tomen en cuenta la maternidad y las infancias y accesibilidad universal en cuestión del costo del transporte público.
El 17 de mayo se publicó en el “Diario Oficial de la Federación” (DOF) la “Ley general de movilidad y seguridad vial”, en el que los estados contaban con 180 días para su armonización, por lo que el plazo máximo se cumplirá este 26 de noviembre.
Aunque el 8 de noviembre los diputados del PAN, Enrique Correa Sada y Mariela Morán, ingresaron la iniciativa de ley por la que se adiciona un párrafo al artículo tercero de la Constitución Política de Querétaro, en el que se reconoce la movilidad como un derecho, el dictamen todavía no ha sido discutido en la comisión de Movilidad Sustentable y Tránsito del Congreso local.
Sin embargo, Correa Sada, presidente de la comisión, aseguró que la armonización de la ley que se prepara en Querétaro tendrá que abordar la movilidad del cuidado en dos fases.
“Hay que meter los conceptos en la Ley de movilidad, pero también hay que armonizar todos los códigos urbanos y reglamentos en materia de construcción que permitan a la autoridad municipal, que es la que tiene mayor involucramiento en la construcción de infraestructura dentro de los centros urbanos, para que se considere de esta manera”.
Y por otro lado, explicó, es involucrar a las autoridades que ejecutan la obra pública para que en todas las nuevas obras o adecuaciones que se realizan se consideren estas medidas.
“Es un reto muy grande porque las ciudades se construyeron hace mucho tiempo por ejemplo el Centro Histórico o los asentamientos irregulares en donde los espacios que se dejaron para las banquetas y vialidades no son los adecuados”.
Añadió que con la creación de la nueva Agencia de Movilidad se va a construir una política pública de inclusión en el transporte público y que las nuevas unidades cuenten con accesibilidad como las unidades de ” cama baja”, es decir, sin escalones.
– La movilidad del cuidado se refiere a los trayectos que se deben recorrer para acceder a:
• Escuelas
• Centros de salud y/o hospitales
• Lugares recreativos
• Centros administrativos y distintos servicios.
• Viajes para abastecer de alimentos y de productos de consumo cotidiano.
Características:
• Las mujeres realizan diversas paradas antes de llegar al destino final relacionadas con actividades del hogar y de cuidados.
• Son trayectos poligonales, que no tienen horarios fijos, que no tienen trayectos encadenados.
• El trabajo del hogar y de cuidados no remunerado aporta el 27.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), según Inegi.
• La movilidad del cuidado está reconocida en la nueva “Ley general de movilidad y seguridad vial”, que entró en vigor en mayo de 2022, específicamente en su artículo 32 denominado “Movilidad con perspectiva de género”.