Con la muerte de Silvio Berlusconi desparece un personaje clave de la vida política de Italia
El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi ha muerto en el hospital San Raffaele de Milán a causa de la leucemia que padecía desde hace tiempo, informaron hoy los medios italianos.
Berlusconi, de 86 años, había sido ingresado el pasado viernes, para someterse a una serie de controles “programados” por su leucemia, y con su muerte desparece un personaje clave de la vida política de Italia.
Por el momento no hay confirmación oficial, pero según las mismas fuentes, el fallecimiento se produjo esta mañana, poco después de que sus cinco hijos y su hermano, Paolo, acudieran al hospital.
Eso levantó todas las alarmas sobre su estado de salud, que empeoró durante la pasada noche.
Paolo y la primogénita de Berlcusconi, Marina, fueron los primeros en llegar en torno a las 9.30 horas (7.30 GMT) al centro médico, donde se unieron a su compañera, Marta Fascina, 53 años más joven que él y que ha permanecido siempre a su lado, y después lo hicieron sus otros hijos, Eleonora, Barbara, Pier Silvio y Luigi.
El pasado viernes, sus médicos aseguraron que Berlusconi había ingresado en el Hospital San Raffaele para someterse a “controles programados de su conocida patología hematológica” y que su ingreso no respondía “a algún aspecto crítico ni alarma”.
Berlusconi volvía así al hospital tres semanas después de recibir el alta, tras pasar 44 días ingresado por una pulmonía agravada por una leucemia que, según reveló entonces su equipo médico, padecía desde hacía tiempo.
Durante ese tiempo estuvo acompañado en todo momento por su novia, la diputada Marta Fascina, 53 años más joven, y recibió las visitas de sus más cercanos colaboradores, de sus socios, como Giorgia Meloni, y de su familia, como sus cinco hijos, además de numerosos amigos.
Desde el hospital, el magnate incluso llegó a aparecer en dos vídeos: uno para animar a los italianos a votar en las elecciones locales y otro para intervenir en la convención de su partido, en el que aseguraba estar “listo” para regresar a la batalla.
El parte médico de su doctor de confianza, Alberto Zangrillo, reveló que Berlusconi estaba siendo tratado de una “infección pulmonar” causada por “una condición hematológica crónica de la que es portador desde hace tiempo: la leucemia mielomonocítica crónica”.
La leucemia mieloide crónica es una forma de cáncer de la sangre que puede aparecer sobre todo en personas mayores de 60 años y los médicos precisaron entonces que se estaba sometiendo a “tratamiento citorreductor especializado” y a quimioterapia.