Señaló que será un juez quien deberá deslindar algún tipo de responsabilidad en el caso
No hubo un exceso de la fuerza en la muerte de Ariel, el joven que falleció el pasado 29 de agosto mientras se encontraba bajo custodia de la policía estatal, afirmó el gobernador Mauricio Kuri González.
Pese a que la familia asegura que según el acta de defunción, la causa de su muerte fue por un “trauma cerrado de abdomen, bajo custodia” y que los policías ejercieron un uso excesivo de la fuerza, el gobernador rechazó dichas declaraciones.
Sin embargo, consideró que será un Juez quien tendrá que deslindar las responsabilidades.
“No, el dato que tengo es que no hubo exceso, pero eso lo tendrá que decir un juez, no soy yo quien tenga que decirlo, el dato que tengo es que venía – Ariel- con unos problemas esta persona, con una intoxicación, pero lo tendrán que deslindar un juez directamente (…) El dato que yo tengo es que ya traía una intoxicación fuerte”.
Por el hecho, la familia de Ariel se manifestó el domingo 3 de septiembre para exigir justicia por su muerte; además, rechazó que este estuviera bajo los efectos de sustancias tóxicas.
Asimismo, un día después de la protesta por parte de los padres y hermanos de Ariel, el titular de la Defensoría de Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), Javier Rascado Pérez, confirmó que la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) dio parte del deceso del joven, por lo que ese mismo día el órgano inició una queja de oficio para esclarecer si hubo violaciones a los derechos humanos por parte de los policías.
Explicó que en el informe proporcionado por la SSC se detalló que, presuntamente, Ariel comenzó a sentirse mal desde el momento en que fue detenido, mientras le tomaban sus datos.
Sobre este caso, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del Estado de Querétaro, Mariela Ponce Villa, informó que un elemento de la Policía Estatal (PoEs) fue vinculado a proceso por el delito de homicidio.
