El director de Protección contra Riesgos Sanitarios puntualizó que durante 2023 no han aplicado clausuras o suspensiones en rastros
Falta de limpieza en los instrumentos de trabajo y de control de fauna nociva son dos de las anomalías que se han detectado como resultado de las 24 visitas de inspección en rastros y casas de matanza en el estado que realizó durante el año la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios.
Así lo confirmó su titular, José Samuel García Sánchez, quien también reconoció que, en muchas ocasiones, las presidencias municipales, que bajo su responsabilidad tienen la operación de rastros, “tardan mucho” en subsanar y dar respuesta ante el señalamiento de dichas anomalías.
“Nosotros realizamos dos verificaciones al año. Los presidentes municipales tardan mucho en darnos las respuestas a esas anomalías. Los rastros son una actividad que le corresponde al municipio, de acuerdo con el artículo 115 constitucional, y a nosotros hacer la vigilancia sanitaria (…) les damos un tiempo de prórroga para que nos subsanen estas anomalías encontradas en el acta”, dijo.
Tras puntualizar que, durante el 2023, no han aplicado clausuras o suspensiones, señaló que entre otras anomalías que han identificado se encuentra la falta de datos en las órdenes de sacrificio, situación que, dijo, complica la rastreabilidad en caso de que una muestra de producto presente alguna irregularidad.
“No se cuenta con un registro de cloro residual para la limpieza de los canales, a veces las vísceras… vemos que están ahí desollando en el piso, falta de control de fauna nociva y a veces las guías de tránsito pecuarias o las órdenes de sacrificio no cuentan con los datos completos del interesado o vendedor de origen”, apuntó.
Explicó que, de acuerdo con las normas oficiales mexicanas, el rastro es aquel espacio en donde se sacrifican arriba de 28 cabezas de ganado mayor, 56 de ganado menor y mil aves domésticas, y que aquellos espacios en los que se manejan cifras menores a estas son los que se llaman casas de matanza. Agregó que en la entidad existen 13 casas de matanza y seis rastros.