El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos advirtió que el huracán Beryl es “extremadamente peligroso” para islas caribeñas como Granada y San Vicente y las Granadinas
Tras haberse convertido en un ciclón tropical categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, el huracán Beryl se desplaza sobre las aguas del Mar Caribe con rachas de viento “extremadamente peligrosas”; informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).
Durante las primeras horas del lunes 1 de julio, dicho fenómeno meteorológico –considerado como “extremadamente peligroso”– comenzará a impactar islas caribeñas como Granada y San Vicente y las Granadinas.
Actualmente, se ubica a 320 kilómetros al sureste de Barbados y a 480 kilómetros de San Vicente; tiene vientos máximos sostenidos de 215 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 260 kilómetros por hora. Y se mueve hacia el oeste a una velocidad de 33 kilómetros por hora.
Las islas de Barbados, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Granada y Trinidad y Tobago han emitido alertas para su población por vientos potencialmente destructivos y marejadas ciclónicas.
Key Messages for Hurricane #Beryl at 5pm AST June 30th:
Extremely dangerous Category 4 hurricane approaching Windward Islands, with highest risk of the core going over St. Vincent & the Grenadines, and Grenada early Monday Morning. All preparations should be rushed to… pic.twitter.com/8Lsvtoy4Wy
— National Hurricane Center (@NHC_Atlantic) June 30, 2024
Por su parte, República Dominicana, Haití y Martinica han advertido sobre efectos de tormenta tropical.
Según el pronóstico del NHC, el huracán Beryl seguirá moviéndose sobre el Mar Caribe durante esta semana; y llegaría a la Península de Yucatán como ciclón tropical categoría 2 entre el jueves y el viernes.
“En la trayectoria del pronóstico, se espera que el centro del huracán Beryl se mueva a través de las Islas de Barlovento el lunes por la mañana y a través del Mar Caribe sureste y centro hasta el miércoles”, agregó.
Hasta ahora, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de México ha explicado que dicho fenómeno natural “por el momento no representa peligro para el territorio mexicano”.