El gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, informó sobre la detención del presunto responsable de la muerte del sacerdote Marcelo Pérez Pérez
Este martes, las autoridades detuvieron al presunto responsable de la muerte del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, según informó el gobernador del estado de Chiapas, Rutilio Escandón, en medio del funeral del sacerdote asesinado el domingo pasado.
“Mi reconocimiento a las autoridades de justicia quien me ha informado que ha sido detenido el autor material de la muerte del padre Marcelo”, publicó el mandatario estatal en sus redes sociales.
Mi reconocimiento a las autoridades de Procuración de Justicia, quienes me han informado que ha sido detenido el autor material de la muerte del Padre Marcelo.
— Rutilio Escandón (@RutilioEscandon) October 22, 2024
La Fiscalía de Chiapas detalló en un comunicado que el detenido está identificado como Edgar ‘N’, acusado del delito de homicidio, en un operativo realizado en la mañana del martes en San Cristóbal de las Casas.
Según el reporte policiaco, un grupo del Ministerio Público reviso a detalle las cámaras de vigilancia del C5, realizó labores de investigación y recabó declaraciones de testigos, lo que permitió identificar al presunto atacante, a quien le ejecutó una orden de arresto como “autor material de este lamentable hecho”.
El padre Marcelo, indígena tzotzil y defensor de los pueblos originarios que denunciaba la violencia del crimen organizado, recibió un ataque con arma de fuego cuando estaba en su vehículo en el barrio de Cuxtitali, en el oriente de la ciudad turística de San Cristóbal de las Casas.
Según un video que circula en redes, el crimen ocurrió a las 8:05 hora local, cuando el religioso recibió varios disparos por parte de un sujeto que lo esperaba en una esquina y lo sorprendió a bordo de su vehículo, minutos después de que ofició una ceremonia religiosa.
Dan sepultura al padre Marcelo
El cura de la etnia maya tzotzil fue sepultado este mediodía en un predio de la iglesia de San Andrés Apóstol, en el municipio de San Andrés Larrainzar, comunidad zapatista donde se firmaron los acuerdos de San Andrés 1996.
Cientos de indígenas desplazados, defensores de derechos humanos, miembros de organizaciones civiles despidieron al padre Marcelo, quien caminó con ellos en defensa de la tierra, el territorio, el agua y los derechos humanos, exigiendo la paz y justicia.
Pascuala Vázquez, indígena tzeltal, integrante del gobierno comunitario de Chilón, describió al sacerdote como “un ejemplo para los pueblos”.
“El gobierno comunitario siempre estuvo acompañando y él nos enseñó a todos nosotros a ver y a denunciar las injusticias en nuestro municipio. Él nunca nos enseñó a defender nuestros derechos a través del arma”, expresó Vázquez.
Agregó que aún se encuentra “consternada por la noticia” del crimen, pues el cura solo “buscaba la reconciliación y la palabra”.
Guadalupe Vázquez Luna expresó que con la sepultura del cura “crecerá uno de esos árboles de la vida que fructificará”.
“Solo así, en nuestro hermoso nido, Chiapas, volverá a nacer el sol y brillarán luces de paz en los ojos de nuestras niñas y niños”, expresó Vázquez Luna, sobreviviente de la masacre de Acteal 1997.
