Con 81 votos a favor y 39 en contra, el Senado aprobó leyes secundarias en materia energética; la reforma energética busca fortalecer el control estatal sobre el sector, así como priorizar a la CFE y Pemex
El Senado de la República aprobó este miércoles la reforma energética de la presidenta Claudia Sheinbaum, que tiene como objetivo fortalecer el control estatal sobre el sector y priorizar a las empresas públicas: Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex).
La iniciativa fue respaldada en lo general y particular con 81 votos a favor y 39 en contra, y ahora se enviará a la Cámara de Diputados para su discusión y posible aprobación antes de su oficialización y entrada en vigor.
La reforma propuesta por Sheinbaum promueve la expedición de ocho nuevas leyes y la modificación de tres ordenamientos vigentes, entre las que destacan las leyes de las empresas públicas del Estado de CFE y Pemex.
En ambos casos regula la organización, administración y operación de las estatales como empresas públicas y establece un régimen especial para cada una de ellas.