El FC Barcelona se lleva mínima ventaja al partido de vuelta; un autogol definió la ida, donde el Real Madrid no logró rematar a portería
Las semifinales por la Copa del Rey presentaron una edición más del clásico español, el Real Madrid recibió al Barcelona en el Santiago Bernabéu, con la intención de encaminar la eliminatoria y tomar revancha de la derrota que sufrió en la Supercopa a manos de los blaugranas.
Los equipos más importantes de España llegaron al juego con realidades distintas. Barcelona líder de LaLiga, siete puntos por delante del Real Madrid, pero eliminado de la UEFA Europa League; los merengues, por su parte, acortaron distancias en liga y golearon de visita al Liverpool en Champions League.
El partido arrancó con dominio alterno, con posturas claras, los de Xavi Hernández, lejos de su estilo, cedieron la posesión de la esférica a la oncena de Ancelotti que asumió su rol como protagonista del encuentro.
Par de goles en aparente fuera de juego
Karim Benzema rompió el cero a los 11 minutos, luego de un centro preciso de Vinícius Junior; sin embargo, el gol no subió al marcador por fuera de lugar del francés.
El Barcelona se asentó bien en el campo y a pesar de que no tenía el dominio de la pelota, ejerció presión en todas las zonas de la cancha. Así cayó el primer tanto del encuentro.
La presión alta provocó un error en la defensa merengue que dejó el balón libre para Ferran, el español filtró un pase que dejó a Kessié mano a mano con Courtois y, aunque el marfileño estrelló su remate en el arquero belga, el rebote se estrelló en las piernas de Éder Militão para el 0-1.
En primera instancia el árbitro anuló el autogol, por fuera de lugar, pero tras la revisión del VAR el tanto subió al marcador.
En los minutos finales del primer tiempo el Barcelona no cambió su postura y siguió presionando con intensidad en todas las zonas del campo, hasta que Toni Kroos rompió la línea defensiva blaugrana con un pase cruzado que encontró a Dani Carvajal; sin embargo, el lateral español mandó su remate muy por encima del arco defendido por Marc-André ter Stegen.
El cerrojo de Xavi
Para el complemento, Xavi Hernández decidió retrasar demasiado sus líneas y se defendió en propia área, sin conseguir salir a velocidad, con un errático Raphinha.
A pesar de la presión, los de Ancelotti no lograron generar ocasiones de peligro. Fue el Barcelona quien estuvo cerca del segundo gol, un buen centro de Gavi encontró a Kessié que remató a portería pero su disparo se estrelló en Ansu Fati, que evitó el gol de su equipo.
El 4-5-1 que planteó Xavi resultó un cerrojo para el Real Madrid, que buscó a Vinícius y a Rodrygo en las bandas, sin encontrar profundidad.
Sobre el 90’ Rodrygo intentó con un disparo de fuera del área y su remate salió apenas a un lado del poste. Once remates totales generó el Madrid sin encontrar portería en ninguno de ellos.
Sin sus mejores jugadores de mediocampo hacia adelante, Xavi planteó el partido desde la inferioridad anímica y dejó al equipo de Ancelotti sin remates a portería; con apenas el 35% de posesión, se lleva ventaja al partido de vuelta que se jugará el 5 de abril en el Spotify Camp Nou. Antes, el 19 de marzo se verán las caras en LaLiga.