Barcelona derrotó, sin brillo, al Unionistas de Salamanca, equipo de tercera división, y avanzó a los cuartos de final de la Copa del Rey
El FC Barcelona consiguió su pase a los cuartos de final de la Copa del Rey al derrotar 3-1 al Unionistas de Salamanca, equipo de tercera división del futbol español, en un partido más sin brillo para los dirigidos por Xavi Hernández.
Durante la primera parte, el conjunto culé volvió a mostrar las carencias defensivas que arrastra desde principio de temporada. Con muy poco los rivales le generan peligro y se plantan frente a su portería.
Sobre la media hora de partido, Álvaro Gómez aprovechó un centro frontal de Juan Serrano, para rematar de primera intención y mandar la pelota a la red para el 1-0, ante el desorden defensivo blaugrana.
La oncena culé volvió a mostrarse falto de ideas en ofensiva, pero consiguió empatar el juego, en los instantes previos al descanso, gracias a un contragolpe bien llevado por Ferran Torres, que definió de parte interna sobre el poste derecho del arquero Iván Martínez.
El Barça avanza, pero no disipa las dudas
Para el complemento, Xavi dio entrada a Pedri, Gündogan y Lewandowski, lo que dio un salto de calidad a su equipo.
Unionistas optó por retrasar sus líneas para aguantar el empate, pero su estrategia no funcionó, pues esto le dio mayor espacio al Barça para llegar al área rival, algo que le costó mucho durante le primera mitad.
Fue Jules Koundé quien sacó provecho de estos espacios. El defensor francés envió un disparo lejano que se coló a la red, para el 1-2, al minuto 69.
Cuatro minutos más tarde, Alejandro Balde marcó el definitivo 1-3, en una jugada donde condujo el balón por toda la banda izquierda, sin encontrar oposición, y apenas entrando al área, fusiló al guardameta Martínez.
🍿 𝙃𝙄𝙂𝙃𝙇𝙄𝙂𝙃𝙏𝙎 🍿
Unionistas 1-3 Barça
💥 Ferran
🚀 Kounde
🕸️ Balde pic.twitter.com/T6tNDGUfXC— FC Barcelona (@FCBarcelona) January 18, 2024
La victoria pone al Barcelona en cuartos de final de la Copa del Rey, pero no disipan las dudas sobre el pobre funcionamiento del equipo, que una vez más se mostró frágil en defensa e inoperante en ataque.
