“Checo” Pérez afirma que vivió una semana difícil en España pero aprendió y llega con ganas de revancha al Gran Premio de Austria
Sergio “Checo” Pérez afirma que vivió una semana difícil en España, donde terminó octavo lugar, pero aprendió y llega con ganas de revancha al Gran Premio de Austria que se disputará este fin de semana.
“Mi fin de semana en España fue difícil, pero fue un fin de semana del que aprendimos. Tuve problemas con el equilibrio del auto durante todo el fin de semana. No logramos tener un reglaje consistente ni situarlo en una ventana para la calificación o para completar la carrera que queríamos; y la penalización (de tres puestos) en parrilla también nos perjudicó”, reconoció el mexicano que es quinto en el Mundial, con 111 puntos.
Ahora, “Checo” asegura que él y su equipo saben cuáles son los puntos que deben mejorar para lograr el mejor lugar posible y acercarse a los primeros sitios de la clasificación.
“El equipo y yo sabemos en qué áreas tenemos que mejorar; y lo vamos a hacer. Mi tarea la de sacar lo máximo del coche, porque tendremos rodaje limitado, al ser un fin de semana con formato sprint, por lo que tengo que lograr lo máximo posible en el primer (y único) entrenamiento libre y atacar la calificación desde el principio”, externó.
Finalmente, el piloto mexicano de Red Bull se dijo motivado por todo lo que envuelve al Gran Premio de Austria, casa de su escudería.
“Queremos y necesitamos un fin de semana completo. Austria siempre es una gran carrera. Es la casa de Red Bull y eso siempre convierte el ambiente en brillante. Así que ya tengo ganas de que empiece”, sentenció.
