Entre chismes y campanas 15 de junio

La ciudadanía apostó por la continuidad

“La transición será ejemplar y responsable”, dijo ayer el gobernador Francisco Domínguez en el marco de su reunión con el gobernador electo Mauricio Kuri en Palacio de Gobierno…

Y eso es precisamente lo que la ciudadanía espera una vez que acudió a votar y decidió apostar por la continuidad, aunque haya quien no lo entienda aún y pretenda sembrar la inestabilidad.

A regañadientes…

Una semana después y a regañadientes, Celia Maya tuvo que aceptar su derrota… y aunque aseguró que “no será un obstáculo para un relevo pacífico de las instituciones”, también dijo que no impugnaría la elección, porque las pruebas con las que cuenta no son suficientes para reclamar la nulidad y arremetió en contra del Instituto Electoral del Estado de Querétaro (IEEQ).

“El IEEQ perdió de vista que era el garante de unas elecciones limpias y bajo la observación se le olvidó su quehacer político y no cumplió. La mayoría de los delitos se comete al amparo de la asechanza oculta, por lo cual no es sencillo contar con evidencia de su comisión, lo cual no significa que las conductas ilegales no hayan existido”, afirmó, lo que, en su calidad de exmagistrada, no la deja muy bien parada que digamos.

¿Una blanca palomita? ¡Ahora resulta!

Como suele suceder en estos casos, los “adversarios” de las administraciones panistas en Querétaro de inmediato salieron a la defensa de Sergio Jerónimo Sánchez tras su detención, la mañana de este lunes en Plaza de Armas, junto con otras cuatro personas, por alterar el orden público, según informó la Policía Estatal, y, como siempre, recurrieron a las consignas de ¡gobierno represor! Incluso, algún militante de Morena se atrevió a asegurar: “Apenas es gobernador electo y Kuri mandó reprimir a Sergio Jerónimo”.

Pero también está el otro sector de la sociedad, el que no olvida que este personaje -integrante del Frente Independiente de Organizaciones Zapatistas (FIOZ), vinculado al Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN)- fue señalado por participar en la agresión aquí en Querétaro al autobús en el que viajaban integrantes del gabinete del entonces presidente Ernesto Zedillo. Fue procesado por despojo y pasó varios años en prisión; en el 2016, se le acusó de encabezar los disturbios del desfile del Día del Trabajo…

¿Así que ahora resulta que es una blanca palomita que solo les estaba enseñando a los artesanos lo que dice la Constitución?

Y si en este contexto nos preguntamos: ¿queremos que en Querétaro se aplique el Estado de derecho… o queremos ser rehenes de alborotadores profesionales que lucran con la pobreza de los más vulnerables?… Baste responder que el pasado 6 de junio, los queretanos ya tomaron una decisión al respecto.