El fotógrafo, director y productor Alfredo Alcántara compartió que el documental “No olvidado”, ganador del Emmy a Mejor cortometraje en español, le cambió la vida, pues nunca imaginó encontrarse tan de cerca con las impactantes historias de migrantes fallecidos en su paso por el desierto de Arizona
Encontrarse con historias tan distintas y tan enriquecedoras que gracias a la cinematografía pueden hacerse visibles es lo que más disfruta el productor mexicano Alfredo Alcántara al hacer documentales.
El cineasta nacido en Ciudad de México, pero radicado algún tiempo en Querétaro, compartió con “Códigoqro” algunos de los trabajos más impactantes que le han tocado realizar, teniendo preferencia por los que buscan innovadoras maneras de contar una historia.
Su sueño
“Me encantaría seguir haciendo historias en México, estamos en la posproducción y edición de un largometraje que produzco y dirijo junto con mi hermana Isabel (…) habla sobre el agua en la zona de Querétaro y Guanajuato. Me encantaría seguir haciendo historias sobre el agua, sobre el medio ambiente, sore el campo en México”.
Cinematografía de ficción
Aunque se ha enfocado en el documental, también ha destacado en la cinematografía de ficción fotografiando cortometrajes para seguir explorando la iluminación, que es algo que “me encanta y que en los documentales no tienes el chance (…) estoy trabajando como fotógrafo en una serie para Snapchat, que se estrena en noviembre, que se va a llamar ‘Run for office’ y sigue la historia de ocho jóvenes que están en Estados Unidos lanzándose a puestos políticos por primera vez; cada uno de ellos tiene menos de 22 años (…) y la serie explora su experiencia tratando de conseguir votos”.
Una pasión heredada
Su gusto por la cinematografía surgió gracias a que se crio rodeado de cámaras, lámparas y equipos de edición, ya que su padre se dedicaba a la producción de comerciales.
“Desde pequeño me encantaba hablar con los camarógrafos, con la gente que producía los comerciales, que principalmente eran de refrescos y tenían cosas muy bonitas de iluminación, trabajaban mucho con comida y me encantaba ver cómo hacían las tomas los camarógrafos y los directores de fotografía”, indicó.
Asimismo dijo que, gracias a este acercamiento con la industria cinematográfica, siempre supo que quería ser camarógrafo; de hecho, su primera cámara fue una VHS y la recibió en Navidad a los 11 años.
“Empecé a hacer películas en el jardín de mi casa y fue hasta después de la secundaria que comencé a pensar más en serio en estudiar cine; terminé la secundaria en Querétaro y me fui a estudiar a Estados Unidos la prepa, envíe mi solicitud a la escuela de cine y me decían que todavía estaba muy chico para aplicar (…) le eché muchas ganas en la prepa para poder tener un material de cine padre para poder entrar”.
Su primer gran trabajo
Antes de graduarse de la universidad consiguió su primer trabajo como fotógrafo en el documental “American promise”, seleccionado para el festival de Sundance en 2013, llevándose el Premio Especial del Jurado.
“Por una serie de coincidencias empecé a trabajar en el mundo del documental. Todavía estaba en la escuela cuando me ofrecieron mi primer trabajo de fotógrafo en un documental que se estaba rodando en Nueva York (…) ‘American promise’ es una historia que sigue las vidas de dos chavos afroamericanos que están creciendo en Brooklyn y a uno de ellos lo aceptan en una escuela privada muy prestigiosa en Nueva York y el otro tiene que entrar en una escuela pública, entonces, sigue la trayectoria de cómo ellos van cambiando, aunque son mejores amigos, inevitablemente sus vidas empiezan a cambiar dependiendo de las oportunidades y la gente con la que interactúan; se filmó a lo largo de 12 años (…) a mí me contrataron porque estaban buscando un fotógrafo que de alguna manera pudiera infiltrarse a las fiestas, yo estuve durante los últimos cuatro años. Fue un pequeño accidente de suerte, porque aprendí mucho sobre cómo filmar un documental, empecé a agarrar un estilo con el trabajo de cámara de mano, siguiendo una historia que no tiene guion, sino que todo pasa delante de tus ojos y debes aprender cómo puedes crear una historia”.
Orgullo mexicano
Como parte de su trayectoria, trabajó en CNN como productor durante tres años y en ese tiempo tuvo acceso a historias que jamás hubiera imaginado y que le dejaron un gran aprendizaje.
“Cuando estaba en CNN tuve la oportunidad de producir, dirigir, fotografiar y editar un cortometraje que siguió la historia de un grupo de voluntarios que se juntan una vez al mes y salen a la zona más peligrosa entre el cruce entre Estados Unidos y México, en Arizona, una parte del desierto en donde no hay acceso a agua, no hay nada y con todas las políticas migratorias muchos migrantes tienen que elegir esa ruta (…) es una de las zonas más extremas en cuanto a calor, peligro, y tuvimos la oportunidad de seguir a estas personas que se dedican a buscar a los migrantes que desaparecen en esta zona, y la verdad yo nunca me hubiera imaginado estar en una situación tan extrema y tan real, porque uno ve este tipo de historias en las noticias y son tantas las tragedias que vemos en los medios que pierden impacto (…) ser parte de este trabajo me cambió mucho porque estuvimos en estas zonas con restos de seres humanos (…) el proyecto fue nominado y ganó el Emmy como Mejor cortometraje en español (…) fue increíble porque la gente le puso atención al proyecto (…) ahorita que pienso en esto, eso es lo que más me gusta del documental: que de alguna manera ayudas a que una voz se pueda escuchar”.
Frases
“No tengo una forma muy clara de escoger los proyectos, he tenido muchas oportunidades y me siento muy afortunado de trabajar con directores que están muy involucrados en activismo, ambientalismo, gente que trabaja en diferentes temas, como migración, ciencia y naturaleza”.
“El documental me gusta porque siempre estoy aprendiendo algo nuevo, a veces en el cine de ficción en el rodaje puede haber una rutina, más control sobre un mundo ficticio que tú creas y que es artístico, pero el documental es más salvaje, tiene más movimiento y, como no puedes controlar la vida real, a veces es estresante, pero te hace adaptarte”.
