Sí, todavía existimos: partera en Querétaro

En la capital queretana hay siete parteras que se dedican a acompañar a mujeres y parejas en el proceso de la maternidad, desde la preparación de la concepción hasta el alumbramiento. Erika Jocelyn González Espino, con 16 años de experiencia, cuenta a “CódigoQro” cómo ha sido su labor

En la capital del estado de Querétaro hay siete parteras, quienes diariamente acompañan a mujeres y parejas en la búsqueda de un embarazo, desde la preparación para la concepción hasta el alumbramiento y posparto con una atención no solo para la madre, sino también para el padre y el resto de la familia.

Una de ellas es Erika Jocelyn González Espino, partera de la tradición en la ciudad de Querétaro, quien desde hace 16 años ejerce el saber ancestral y, hoy en día, acompaña hasta cinco nacimientos a la semana, ya sea en casa o, como parto humanizado, dentro de un espacio hospitalario, si así lo deciden los padres.

“Esta es mi vida y mi forma de trabajo; diariamente solo hago partería. Se piensa que las parteras solo están en la zona comunitaria o rural, y no, las parteras también estamos en la zona urbana. ¿Cómo empiezo aquí? Es un llamado a darme cuenta que hay otras medicinas, que no solo existía la medicina blanca ni la académica, sino que había otros saberes para acompañar nuestra salud y autoconocimiento”, dijo.

Políticas públicas mantienen a las parteras en un rincón

Tras referir que las políticas públicas del país han hecho que las parteras tradicionales se mantengan aisladas en un “rincón”, puntualizó que existen varios caminos para ser partera o partero; el más antiguo es la transmisión del saber y “la autorización jerárquica” por parte de una abuela o un familiar.

Sin embargo, también indicó que en la actualidad ya existen estados que cuentan con sistemas escolarizados de “partería profesional a nivel técnico”; así como licenciaturas, como la de enfermería y obstetricia.

“La mayoría piensa que ya no hay parteras, pero sí, todavía existimos. Yo creo que la partería siempre va a existir; ha existido y seguirá existiendo porque las mujeres tienen derecho a decidir dónde, cuándo y con quién parir. Además de que en México hay comunidades sin servicios básicos a donde todavía no llega oportunamente la atención de los servicios de salud públicos y, entonces, es cuando nosotras resolvemos y damos la atención”, dijo.

Señaló que aunque desde la trinchera de la medicina convencional se maneja en el discurso que “todo embarazo se puede complicar”, por el contrario, en la partería tradicional se tiene la visión de que “ningún parto se va a complicar si se acompaña, nutre y cuida su entorno”, ya que se trata de un proceso fisiológico.

“Sí hay algunos procesos gestacionales, algunos embarazos que podrían complicarse, pero es el menor número; en general, las mujeres y los hombres creamos a bebés sanos. ¿Para quién la opción de un parto en casa? Para todo aquel que quiera apropiarse de su proceso y va a implicar corresponsabilidad desde la alimentación hasta el cuidado del entorno psicoemocional. Es una reconquista del proceso por parte de la madre o ambos padres”, apuntó.

NOM no beneficiará a parteras tradicionales

González Espino manifestó que, históricamente, las autoridades del sector salud público y privado han responsabilizado a la partería de las muertes maternas y, en este sentido, aseveró que la creación y expedición de una Norma Oficial Mexicana (NOM), como anunciaron autoridades federales en septiembre de este año, solo beneficiará a las parteras “de escuela” y no a aquellas que obtienen el saber de manera tradicional.

“Si bien los índices de muerte materna han cambiado, hay muertes que no vamos a poder evitar. Hoy el mayor número de muertes maternas ocurre dentro de hospitales, tanto públicos como privados”, subrayó.

En este sentido, consideró que lo que necesita la medicina tradicional mexicana; en este caso, la partería, no es una nueva normatividad, sino políticas públicas que acompañen y reconozcan los diferentes modelos de atención.

“En realidad estamos preocupadas porque, aunque en el discurso pareciera que buscan proteger y acompañar, la realidad es que otra vez están involucradas farmacéuticas y empresarios que quieren apropiarse de saberes ancestrales, decidir quiénes sí y quiénes no, y, otra vez, es una forma de someter. Da pauta a que tome fuerza la partería creada en escuela por modelo biomédico, donde sí usan medicamentos y hacen prácticas médicas”, enfatizó.

En contra del proyecto de la NOM…

El Frente por la Defensa del Patrimonio de los Pueblos Originarios y los Saberes Ancestrales de México ha emitido diferentes posicionamientos en contra del proyecto de la NOM, de la cual tanto el secretario de Salud del gobierno federal, Jorge Alcocer Varela, como el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez, han asegurado que tiene la intención de reconocer, dar protección y certeza jurídica al saber ancestral.

Sin embargo, en su pronunciamiento del 26 de septiembre, el Frente expuso 21 argumentos y posturas por las que se mantienen en contra de la norma, entre ellas:

– La Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas señala que los pueblos indígenas tienen derecho a la libre determinación. En virtud de ese derecho, determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural.

– Rechazamos y denunciamos de manera contundente cualquier intento por certificar, privatizar o patentar los saberes ancestrales por parte de ESCUELAS, INSTITUTOS u ORGANISMOS PRIVADOS y PÚBLICOS con fines de lucro.

– Nos pronunciamos en contra de la NORMA que intenta “regular” la práctica de la PARTERÍA TRADICIONAL, ya que es una iniciativa elaborada de manera unilateral, sin consulta previa, libre e informada.

-Nos pronunciamos de manera categórica cuando de manera errónea se intenta homologar a la “medicina ritual y herbolaria”, “medicina intercultural”, “medicina tradicional indígena”, “medicina tradicional” y “medicina COMPLEMENTARIA”.

-Nos pronunciamos en contra del ROBO SISTEMÁTICO de los saberes ancestrales por parte de empresas, escuelas, certificadoras PRIVADAS y PÚBLICAS, que intentan una y otra vez lucrar y CONFUNDIR a la gente.

-Solo las abuelas parteras serán quienes decidan a sus sucesoras para ser voceras y no una institución PRIVADA o GUBERNAMENTAL.

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