Los tratamientos estéticos están ganando popularidad para prepararse antes del “sí, quiero”, aunque los expertos que los aconsejan recomiendan también combinarlos con una vida sana
El día de la boda suele ser uno de los más importantes para la novia y es muy habitual querer que todo esté perfecto… Incluida una misma. Para lograrlo, hoy día existen tratamientos estéticos no invasivos que son cada vez más comunes entre las futuras esposas.
Para ello, la doctora Cristina Chacón, experta en medicina estética y CEO del centro CCH Privé, explica lo que se puede conseguir en distintas áreas con los diferentes tratamientos más recurrentes.
Eso sí, desde CCH Privé aseguran que se trata de “lograr una apariencia relajada y natural sin cambiar en absoluto nuestra esencia”.
Elegir el tratamiento adecuado
Uno de los factores más importantes que quieren cuidar las novias antes de la boda es la piel, sobre todo la del rostro: lucir una tez radiante que resalte con el vestido nupcial suele ser una de las demandas.
Para ello, según la doctora Cristina Chacón, “en los meses previos a la boda, las novias pueden recurrir a diferentes técnicas para lograr un estado óptimo de la piel y conseguir que esta se vea perfecta en ese día”.
De este modo, se logran “eliminar rojeces, granos, arrugas, sensibilidad o tez apagada, factores que, además, se intensifican en el rostro cuando existe un mayor estrés derivado de los preparativos de este evento”.
Evidentemente, no todas las pieles son iguales ni tienen las mismas necesidades, “por ello, se recomienda crear un plan de tratamientos estéticos antes de la boda según lo que, en cada caso, se quiera potenciar”, explica Cristina.
Y es que se puede optar, por ejemplo, por limpiezas faciales, tratamientos con neuromodeladores para la eliminación de arrugas del tercio superior facial o ‘peelings’ químicos.
Este último es, según CCH Privé, uno de los tratamientos más demandados por las novias. Se trata de una técnica de exfoliación ideal para la eliminación de las células muertas, así como para la estimulación de la creación de colágeno o para activar la circulación de la piel.
‘Peeling’, la técnica estrella
Eso sí, “dependiendo de cada caso, se trabajará con ‘peelings’ superficiales, que incidirán en las capas más superficiales de la piel; ‘peelings’ medios, que tratarán marcas de acné, arrugas y desigualdades en el tono; o ‘peelings’ profundos”, dice Chacón.
Estos últimos “conllevarán unos cuidados más precisos, ya que se eliminarán algunas células de la parte inferior de la dermis, usándose para arrugas de más profundidad o cicatrices más marcadas”.
Esta técnica es, por tanto, “la más fuerte de todas y por ello no es aconsejable realizarla antes de una boda, ya que requiere de mucho más tiempo de recuperación que las otras dos”, advierte la doctora.
Pero para tener una piel bonita, no solo hay que cuidarse por fuera ni todo se reduce a los tratamientos: también hay que cuidarse por dentro, por lo que Chacón aconseja llevar una buena alimentación.
De hecho, hay alimentos especialmente indicados para este fin, por ejemplo, “el aguacate, rico en Omega 3, biotina y vitamina E, contribuirá a lograr una piel luminosa y unas uñas y pelo radiantes”, explica.
Además, la doctora también recomienda “consumir frutas como el kiwi, fuente de vitamina; brócoli, rico en vitamina C, E y colágeno; zanahorias o miel, con propiedades nutritivas o antioxidantes”.
Cuidar el cuerpo por dentro y por fuera
Pero, además, son muchas las novias que quieren moldear su figura de cara a lucir el vestido de novia. Y, para ello, hay varias técnicas de tratamientos quemagrasa y de mejoría del aspecto de la piel mediante presoterapia.
Desde CCH Privé explican: “Esta es una técnica que aplica presión de aire, a modo de masaje, para activar el sistema linfático y mejorar la circulación y oxigenación en todo el cuerpo, ideal para reducir la celulitis y disminuir la retención de líquidos”.
Eso sí, en este caso, la antelación es clave, ya que “para este tipo de tratamientos corporales suelen ser necesarias, al menos, cinco sesiones de media para evidenciar los resultados”, avisa la doctora Chacón.
“Estas sesiones, además, suelen ser semanales, por lo que se debe ser previsor y adelantarnos, al menos, dos meses y medio a la celebración”, recomienda Chacón, que, además, remarca que, sin embargo, este tratamiento no hace milagros por sí solo.
Pero, “para que esta técnica funcione del todo, deberá ir acompañada de una dieta saludable y ejercicio físico”, dice, volviendo a insistir en la importancia de llevar una vida saludable.
Además, la presoterapia puede “combinarse con otros tratamientos como la mesoterapia inyectada corporal, con el fin de combatir afecciones como la grasa localizada, celulitis, arrugas o flacidez”.
Melena digna de anuncio
Otro de los factores imprescindibles para brillar en el gran día es la melena. Y, una vez más, cada pelo es un mundo y hay varios factores a tener en cuenta a la hora de prepararlo, tal y como nos explica la doctora.
Por un lado, “si el cabello está sano, en la rutina preboda se deberá incluir un champú sin sulfatos ni parabenos y una buena mascarilla nutritiva adaptada a las necesidades de cada cabello”.
La cosa cambia en el caso de cabellos que se hayan sometido a algunos procedimientos químicos. Por ejemplo, “si se ha realizado alguna decoloración, probablemente la melena haya quedado más seca y quebradiza, por lo que necesitará un tratamiento de hidratación extra y una reconstrucción de la fibra capilar en un centro especializado”, dice la experta.
Pero en definitiva, y más allá de los tratamientos, hay tres claves para ser una novia radiante el día de la boda: “Seguir una alimentación saludable, realizar ejercicio físico periódicamente y respetar las horas de sueño”, aconseja.
Y es que, según CCH Privé, “el 80 por ciento del éxito de un buen maquillaje de boda dependerá, en la mayoría de los casos, del estado que la piel presente en ese momento, por lo que será fundamental tratarla con cierta antelación”.
Por tanto, ya lo saben: para llegar a tiempo al día del “sí, quiero”, ni la medicina estética ni los hábitos saludables deben dejarse para el último momento. La antelación y las rutinas sanas son la clave.
