La librería donde se puede viajar al cosmos

Al leer un libro, a menudo dejamos volar nuestra imaginación, pero contemplar los volúmenes que expone la nueva librería Zhongshuge, situada en Huai’an, China, nos hace tomar el rumbo de otra realidad, pues su interior representa un portal que nos lleva a través del tiempo y el espacio

Para viajar por el cosmos, descubrir otros mundos y adentrarse en dimensiones desconocidas no hace falta subirse a una nave espacial que viaje más rápido que la luz, utilizar un complejo dispositivo de física cuántica, utilizar gafas de realidad virtual avanzadas, ni tomar una sustancia psicodélica.

Solo hay que visitar la librería Zhongshuge, de la ciudad de Huai’an, en la provincia china de Jiangsu. Su espectacular diseño interior está compuesto por complejas formas cósmicas, plasmadas en madera, mármol y material vidriado que equivale a un fantástico viaje a otra realidad. X+Living es el autor de dicha obra.

X+Living ha causado revuelo en el ámbito arquitectónico, al diseñar una serie de fantásticas librerías en toda China, como la situada en Shenzhen, recorrida en distintas direcciones por una gigantesca estructura espiral similar a una escalera de caracol, y la de Chongqing, rematada por un techo reflectante que multiplica hasta el infinito las laberínticas escaleras, rampas y estanterías en forma de pantallas de lámparas, situadas en el interior.

Ahora, la librería de Zhongshuge, en Huai’an, “equivale a la apertura de un portal a través del tiempo y el espacio situado en medio del ajetreo y el bullicio de la ciudad”, explica Cecilia Huang, directora de marca de X+Living.

Arquitectura del mundo futuro

Rompiendo con el estilo repetitivo y mundano de las estructuras de hormigón armado de los edificios convencionales, el equipo diseñador del proyecto utilizó formas tridimensionales exageradas para recrear intrincados instrumentos astronómicos a gran escala.

El resultado de este concepto de diseño es que la librería Zhongshuge evoca, en los confines de su interior, un espectáculo cósmico de anillos concéntricos que recrean desde un “agujero de gusano”, portal que conecta dos puntos o diferentes momentos del universo, hasta la Vía Láctea, la galaxia espiral donde se encuentran el sistema solar y la Tierra, construyendo un vasto y expansivo ensueño cósmico.

Las paredes de las estanterías con vetas de madera negra junto con las refinadas texturas de mármol dibujan un espacio cósmico ilimitado, donde las estructuras irregulares se organizan esporádicamente, aparentemente adhiriéndose a las reglas que rigen los movimientos celestes y formando piezas mecánicas gigantescas y precisas, según los diseñadores.

Las estanterías con forma de instrumentos astronómicos contienen toneladas de libros dispersos que, a su vez, contienen mundos infinitos, vislumbrando los misterios del cosmos.

Interiores que evocan el cosmos

Esta librería refleja la incesante exploración del espacio exterior por parte de la humanidad, desde la antigüedad hasta el presente, desde la esfera armilar hasta los cohetes espaciales; desde la observación de las estrellas hasta la travesía por el gran vacío interestelar, de todo lo cual los libros son testigos.

El espacio central de la librería está ocupado por una estructura que parece una versión gigantesca, futurista y estilizada de la esfera armilar, un antiguo instrumento astronómico consistente en un modelo reducido del cosmos desde la perspectiva terrestre y utilizado en la Antigüedad y en la Edad Media para determinar la posición de los cuerpos celestes.

En la librería Zhongshuge, decenas de estanterías de diversas formas constituyen planetas de diferentes tamaños, repletos de categorías literarias diferentes. En este fantástico espacio dominado por el hiperrealismo, cada libro que el visitante tiene en sus manos le desvela libremente el pasado y el futuro en medio de la vasta extensión cósmica, aseguran.

Las sugerentes y gigantescas construcciones hechas con materiales tradicionales de madera, yuxtapuestas con el amplio cielo que se observa más allá de las ventanas de vidrio de la librería, conforman un espacio surrealista de increíble escala, que transporta al visitante a otras dimensiones de la realidad.

Tocar las texturas de madera es una experiencia de gran delicadeza táctil, mientras que contemplar las exageradas estructuras del interior de la librería sorprende visualmente al observador, con un choque entre la antigüedad y el futurismo que mantienen un diálogo conceptual a través del tiempo.

Los techos de espejos extienden infinitamente el espacio, transportando al visitante a un reino muy surrealista, como el espacio de múltiples dimensiones en una odisea interestelar.

El edificio de 810 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y que además de las numerosas estanterías de libros incluye un café, una zona de lectura para adultos y otra para niños, y un área de comercialización de productos culturales y creativos, ha sido diseñado bajo un concepto que en términos arquitectónicos se conoce como “planificación espacial de doble capa”.

Este concepto se materializa en un equilibrio meticuloso de los elementos del interior de la librería y en un diseño estructural preciso, con cuerpos celestes gigantes que abarcan ambos pisos, sirviendo como rutas entre los distintos niveles y expresando la continuidad en la estructura espacial, según X+Living.

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