Al dentista, sin miedos

Las técnicas modernas hacen más cómoda la visita al dentista y fomentan hábitos saludables desde edades tempranas

Introducir una rutina de cuidado bucal desde edades tempranas que vaya más allá del simple cepillado puede prevenir problemas dentales comunes como caries y gingivitis que, a largo plazo, pueden derivar en complicaciones que afectan no solo a la boca, sino a la salud en general.

Por ello, enseñar a los niños sobre la importancia de la salud bucal y visitar continuamente al dentista es uno de los pilares para garantizar el bienestar general y una alta calidad de vida desde la infancia.

La especialista y docente en Odontopediatría, Ana Carla Robatto, explica que las innovaciones en el campo de la odontología ayudan al dentista a ser más amigable con los niños.

Por ejemplo, la profilaxis dental, conocida como limpieza, que es realizada con el Protocolo GBT (Terapia Guiada de Biofilm), permite que el niño no tenga miedo de sentir dolor, aunque de todos modos no lo sentirá.

“Este método es moderno y consta de ocho pasos esenciales, que van desde la evaluación inicial para identificar los problemas hasta la comunicación final con el paciente. Utiliza un chorro de agua tibia y un polvo no abrasivo para limpiar los dientes de forma profunda y eficaz. Además de la delicada eliminación de biofilm y cálculos, el protocolo enfatiza la motivación del paciente y la instrucción sobre la higiene bucal diaria, utilizando técnicas que hacen que el proceso sea cómodo, indoloro y sin el ruido propio de los procedimientos odontológicos”, explica Robatto.

Este enfoque cuidadoso y detallado es relevante para el cuidado dental de los niños, ya que proporciona una experiencia sin miedo y fomenta una actitud positiva hacia la salud bucal desde una edad temprana. Para los padres, que necesitan convencer a su hijo para que vaya al dentista, esta práctica también se convierte en una aliada.

Uso de tecnología avanzada en los tratamientos

La incorporación de tecnología de vanguardia en los tratamientos dentales infantiles ha revolucionado la forma en que se abordan las diferentes condiciones bucodentales. Herramientas como los sistemas de radiografía digital permiten obtener imágenes de alta calidad con menor exposición a la radiación, garantizando la seguridad de los niños durante los exámenes diagnósticos.

Así mismo, la utilización de dispositivos de anestesia sin aguja, como la tecnología de infiltración pulsada, ha reducido significativamente la ansiedad y el dolor en los niños durante los procedimientos dentales.

¿Cómo puedo hacer que mi hijo se entusiasme con el cepillado de dientes?

La salud bucal de los niños comienza por mejorar las técnicas de cepillado y es fácil hacer que este sea divertido para ellos: todo lo que se necesita es un poco de creatividad.

Es importante que sea un momento en familia y también ayuda si se pone algo de música o se cuenta un cuento durante el cepillado.

Si se observa que el pequeño necesita ayuda con los movimientos del cepillo, se pueden utilizar técnicas que limpian sin causar daños, como cepillar con el cepillo inclinado a 45° para limpiar las zonas sensibles alrededor de las encías.

¿Qué importancia tiene la dieta para la salud bucal de mi hijo?

Una dieta rica en vitaminas, minerales y fibra ayuda a prevenir enfermedades bucales, mientras que un consumo limitado de azúcares y ácidos contribuye a reducir el riesgo de caries. Según la recomendación de la Sociedad Brasileña de Pediatría (SBP), hasta los dos años los niños no deben consumir alimentos con azúcar añadida bajo ninguna circunstancia.

Fomentar que los niños consuman frutas, verduras y cereales integrales, que beban mucha agua y eviten bebidas endulzadas artificialmente, entre otras cosas, son prácticas que deben existir desde el inicio de la introducción del bebé a los alimentos.

En esta etapa, una alimentación saludable también beneficia la salud de los primeros dientes, los cuales deben limpiarse desde el momento en que sale el primero, alrededor de los seis meses. La SBP recomienda el uso de pasta de dientes en bebés en una cantidad equivalente a un grano de arroz (0.1 g), con una concentración de flúor de alrededor de 1100 PPM.

Un niño que tiene problemas como mal aliento o dientes dañados puede ver afectadas sus relaciones sociales, no sintiéndose seguro al interactuar con otros niños. Por ello, fomentar la educación bucal desde la infancia no solo prepara a los niños para una vida de hábitos saludables, sino que también les enseña la importancia del autocuidado y el bienestar que les ayudará a desarrollarse individualmente y socialmente mejor.

La primera visita al dentista

La primera visita al dentista debe ocurrir entre el momento en que aparece el primer diente y cuando todos sus dientes primarios son visibles (antes de los dos años y medio).

Muchos dentistas recomiendan una visita de “prueba”, que ayuda al pequeño a acostumbrarse a las vistas, sonidos, olores y sensaciones del consultorio dental.

Los niños que suelen tener sus encías limpias y sus dientes cepillados todos los días estarán más cómodos en las visitas al dentista.

Tratamientos más comunes de odontopediatría

Selladores de surcos y fisuras: un método muy efectivo e indoloro para la prevención de caries.

Pulpectomía: una técnica mínimamente invasiva, muy parecida a la endodoncia que se realiza en adultos, pero con la diferencia de que, en este caso, la caries estará afectando a un diente de leche.

Obturación: consiste en reparar aquellas piezas dentales con algún problema de caries mediante empastes que mejoren la salud bucodental del paciente infantil.

Aplicación de flúor: un método preventivo muy útil para endurecer el esmalte de las piezas dentales.

Ortodoncia infantil: corrige patologías de colocación dental, problemas óseos de crecimiento como la mordida cruzada y diferentes tipos de maloclusiones que se tratan mejor en niños y adolescentes por estar en crecimiento.

Limpieza bucal: además de conseguir llegar a cualquier rincón de la boca y reducir las probabilidades de caries, la limpieza profesional es muy útil para que los más pequeños aprendan consejos para mejorar su higiene bucodental.