El 44% de los ciudadanos mexicanos quiere que el Congreso de la Unión regule el uso medicinal y recreativo de la marihuana y 43% está en contra, revela la Encuesta Nacional de Agenda Legislativa (Enale) 2023 realizada por el Instituto Belisario Domínguez de la Cámara de Senadores.
Hace cuatro años, 45% se dijo a favor y el mismo porcentaje que actualmente, en contra.
De los 528 encuestados —el sondeo incluyó 1,200 entrevistas efectivas— que entre el 1 y el 6 de octubre pasado (fecha del levantamiento reportado el mes en curso) manifestaron apoyar la regulación del enervante, 65% dijo estar a favor de su uso medicinal y 2% por fines recreativos.
A la pregunta “¿Por qué está a favor del uso tanto medicinal como recreativo, de la marihuana?”, 10% de los entrevistados respondió que porque ello derivaría en la “eliminación del narcotráfico”; 8%, porque así “habría más control”; 5% dijo que debido a que “es algo natural con beneficios”; 4% estimó que “no es dañino”; 3%, que “es decisión de quien la consuma”; “por fines recreativos”, 2%, y por creer que ello “disminuiría el consumo”, “otros (motivos) sin clasificar” o “no sabe”, registraron 1% en cada caso.
De acuerdo con la segunda encuesta del tipo —la primera fue realizada en 2019—, cuyo objetivo es proporcionar información a los integrantes de la Cámara alta “sobre los intereses y la valoración de la agenda legislativa desde la perspectiva ciudadana”, del total de encuestados 5% respondió estar “ni a favor ni en contra” de que el Congreso mexicano apruebe las iniciativas de reformas para regular el uso de la marihuana; 3% se manifestó “a favor del uso medicinal, pero en contra del uso recreativo”, y 5% dijo no saber o no contestó.
En 2019, 4% estuvo “ni a favor ni en contra” de la aprobación de los cambios legales desde entonces en ciernes; 5% dijo apoyar el uso medicinal pero no el recreativo de la droga y 3% respondió que no sabía o prefirió no contestar.
El 34% de quienes actualmente están en contra de la regulación (43%) consideró que su uso medicinal y recreativo “es dañino/nocivo para la salud”; porque “genera adicción/habrá más consumidores”, 18%; 12% estimó que porque “promueve la delincuencia”; 11% por creer que “no estamos preparados”; porque “es una droga” y “no hay restricciones”, 10 y 8%, respectivamente.
Por “otros motivos”, 2% no respalda legislar al respecto y 5% dijo no saber o no contestó.
Cuatro de cada diez ciudadanos (42%) opina que la inseguridad es el principal problema a atender por los senadores.
El 31% considera que la policía municipal debe fortalecerse de manera prioritaria para mejorar la seguridad en su entorno; 22%, dijo que la Guardia Nacional (GN); la policía estatal, 15%; 11%, que el Ejército y que la Marina, 10 por ciento.
Para 48% de los encuestados, mejorar la educación cívica y la cultura democrática de los ciudadanos es la medida más importante para fortalecer la democracia en México.
El sondeo refiere, además, que 53% de los mexicanos mayores de edad opina que la escasez del agua es la prioridad a atender por el poder Legislativo de manera urgente mediante leyes más completas y estrictas.
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