El aumento de la tasa de interés es una medida de macroeconomía ortodoxa para disminuir la inflación; no obstante, no es medida suficiente
Es incierto cuánto tiempo podría durar el aumento de 50 puntos base a la tasa de interés, dado a conocer por la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico), el cual pasó de 10.50 a un máximo histórico de 11 por ciento, consideró Ricardo Ordaz Vega, académico de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y coordinador de la Unidad de Análisis Económicos e Indicadores.
Añadió que la duración de esta política monetaria también dependerá del comportamiento de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos, pues, explicó, el país carece de autonomía económica desde hace muchos años.
“El Banco de México va a estar atento a los acontecimientos internacionales para acomodar la tasa de interés, de acuerdo con los acontecimientos internacionales, es decir, lo que suceda afuera va a ser, en gran medida, lo que nos va a decir lo que hacen las autoridades fiscales y monetaria en el país”.
Explicó que el aumento de la tasa de interés es una medida de macroeconomía ortodoxa para disminuir la inflación; no obstante, mencionó que no es una medida suficiente porque la inflación es un fenómeno sistémico.
“Lo que estamos viendo aquí es una aplicación correcta de la ortodoxia económica, que no va a ser suficiente porque la inflación de México obedece a un patrón estructural, no solamente a cuánto dinero hay en circulación en la mañana”.
Dijo que, en la macroeconomía ortodoxa, para disminuir las presiones inflacionarias se opta por subir la tasa de interés o disminuir el gasto público, y que el aumento en la tasa de interés coloca al país en un panorama complicado.
“La tasa de interés alta siempre es un problema para la economía, ya que deteriora la inversión, las empresas no invierten porque muchas de las empresas están apalancadas, tienen que sacar créditos para poder invertir; hay un deterioro del empleo y del producto, y las familias también mucho de su consumo a crédito, entonces, al estar la tasa de interés alta, también dejan de consumir”.
