Ferrari no lograba el triunfo absoluto en Le Mans desde hace 57 años, cuando, en 1965, ganó el 250 LM del equipo North American Racing
El Ferrari 499P número 51 del equipo AF Corse, pilotado por los italianos Antonio Giovinazzi y Alessandro Pier Guidi y el británico James Calado, logró la victoria en la edición del centenario de las legendarias 24 Horas de Le Mans de automovilismo de resistencia, una carrera que no ganaba desde hace 57 años.
En su primera presencia en Le Mans en la máxima categoría desde hace 50 años, el Ferrari, que completó 342 vueltas, se impuso por delante del Toyota GR010 Hybrid número 8, del suizo Sébastien Buemi, el neozelandés Brendon Hartley y el japonés Ryō Hirakawa, segundo a un minuto con 21 segundos y 793 milésimas.
Tras ellos acabaron dos Cadillac V-Series R: el número 2, compartido por el neozelandés Earl Bamber y los británicos Alex Lynn y Richard Westbrookque, y que completó el podio a 2:18.917 y una vuelta menos; y el número 3 del francés Sébastien Bourdais, el neozelandés Scott Dixon y el neerlandés Renger van der Zande, cuarto a dos vueltas.
Los favoritos, Toyota, Ferrari, Porsche, Cadillac y Peugeot, se turnaron en el liderato de la prueba y la lluvia también fue protagonista para causar numerosos accidentes y salidas de pista.
Entre los incidentes de la carrera, el más sonado fue el protagonizado por el Toyota nº7, el del británico Mike Conway, el japonés Kamui Kobayashi y el argentino José María “Pechito” López. Con el nipón al volante, el coche se quedó fuera de combate al verse involucrado en un accidente múltiple poco después de la medianoche. Recibió el impacto de un GTE al aminorar excesivamente la marcha y tuvo que retirarse.
Los dos primeros en la tabla final fueron los que menos problemas tuvieron y se disputaron el triunfo en la parte final. El Ferrari número 51 tuvo mucho mejor ritmo. Solo podía perder la carrera en los boxes y pudo suceder a algo más de cinco horas del final, cuando Pier Guidi paró dos minutos para hacer un reseteo del coche. Buemi lo aprovechó para ponerse en cabeza, pero no aguantó mucho tiempo el ritmo del Ferrari.
Y a falta de una hora y tres cuartos para acabar, con Hirakawa al volante, el Toyota tuvo una salida en la que dañó la parte delantera y trasera del GR010. El japonés tuvo que regresar al garaje y perdió tres minutos y toda opción de triunfo.
Los turnos finales del Ferrari fueron de Giovinazzi y Pier Guidi, que acabaron victoriosos y dieron a la marca italiana su 10a. victoria en La Sarthe y la primera desde 1965. Ferrari no competía en la categoría reina de Le Mans desde 1973.