Sus declaraciones se producen tras una semana en la que el crimen organizado ha atemorizado a pobladores del sur y norte de México
El presidente Andrés Manuel López Obrador admitió este jueves un aumento en los asesinatos tras la ola de violencia del crimen organizado y el narcotráfico que ha azotado esta semana a Chiapas, en la frontera sur, y a Zacatecas y Nuevo León, en el norte.
“Hay este tipo de hechos lamentables en distintas partes. Antier y ayer se nos incrementaron mucho los homicidios en el país, sobre todo antier. Ayer ya hubo una disminución, pero bien localizados y estamos actuando, estamos trabajando con ese propósito”, expresó el mandatario en su rueda de prensa diaria.
Sus declaraciones se producen tras una semana en la que cárteles del narcotráfico han atemorizado a pobladores del sur y norte de México.
En Frontera Comalapa, Chiapas, en el límite de México con Guatemala, habitantes han denunciado el abandono del Estado tras la irrupción de un grupo vinculado al Cártel de Sinaloa, que dejó bloqueos en las carreteras y a comunidades sin energía eléctrica porque los criminales impedían el paso de los electricistas.
Además, se viralizó un video en el que pobladores de Chiapas se reunieron en la Carretera Panamericana para aplaudir a un grupo identificado con el Cártel de Sinaloa por liberar los caminos de Frontera Comalapa que la organización criminal había bloqueado.
“Estamos actuando en los dos casos, en Chiapas ya se ha avanzado bastante con el apoyo de la gente, está la Guardia Nacional y esperemos que ya pronto se restablezca la normalidad, la gente está apoyando, confirmo eso, ya se restableció el servicio de energía eléctrica”, indicó el mandatario.
En tanto, en el norte del país, criminales dejaron este martes 12 cuerpos mutilados en las calles de la zona metropolitana de Monterrey, capital de Nuevo León y segunda ciudad más poblada del país.
López Obrador reconoció que existe “una confrontación de grupos” criminales en el estado, fronterizo con Texas, Estados Unidos.
Mientras que en Zacatecas, sujetos armados secuestraron a siete jóvenes, la mayoría menores de edad, de los que solo uno apareció con vida este miércoles.
“Decirle a la población de Zacatecas, de Nuevo León, que estamos trabajando de manera coordinada con las autoridades locales y vamos a seguir combatiendo a la delincuencia, y garantizando la paz, y la tranquilidad, que es nuestra responsabilidad”, sostuvo el gobernante mexicano.
La ola violenta ocurre tras la caída de un 1,68 % interanual de los homicidios en México en el primer semestre de 2023 hasta los 15.122 asesinatos, un promedio de 83 al día.