Se acerca la temporada navideña y, con ello, miles de familias siguen la tradición de poner el icónico árbol que adornará las casas por un par de meses y decorarlo con alegres ornamentos, pero ¿cuál es la opción más sostenible para los árboles de Navidad?
Entre las alternativas ecológicas y menos contaminantes de árboles de Navidad están, desde luego, los árboles naturales, ya que, a diferencia de los fabricados con materiales plásticos, los naturales vienen de un ciclo natural que ayuda a la captura de carbono y su uso apoya a los productores locales.
Al consumir árboles naturales de un origen responsable, el consumidor puede tener la certeza de que al plantarlos se recuperan los servicios ambientales de las tierras, porque durante el tiempo que están en la plantación (el cual puede ir desde los cinco hasta los 10 años), estos pinos sirvieron de refugio para algunos animales, ayudaron a la recuperación del suelo y, sobre todo, a la captación de dióxido de carbono y liberación de oxígeno.
Una vez que los árboles cultivados con el fin de servir como pinos navideños alcanzan su tamaño para ser comercializados, se cosechan y se planta otro para que continúe el ciclo.
Otra bondad de los pinos naturales es que, mientras están en su ciclo de crecimiento, fungen como reguladores del clima y mantienen el ambiente fresco en la plantación, sin dejar de lado la gran belleza escénica que proveen y que también es aprovechada para realizar actividades de ecoturismo.
Además de lo anterior, actualmente, tanto los gobiernos municipales como el federal, a través de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) implementan programas de reciclaje de los pinos navideños, con el fin de aprovechar al 100 por ciento la vida útil de estos árboles, de manera que puedes tener la seguridad de que tu arbolito será aprovechado como composta para la nueva generación de pinos para los próximos años.
Hoy, en México existen muchas opciones para comprar árboles de Navidad naturales, gracias a la labor de productores forestales de 14 entidades que puedes consultar en: https://directorioarboles.cnf.gob.mx/
Con frecuencia se escucha que los árboles de Navidad son extraídos de bosques naturales, pero para este fin existen las plantaciones forestales comerciales, en donde todo el año se preparan para la temporada decembrina, con el cuidado y podado necesarios para darles la forma cónica que conocemos.
Se piensa que comprar un árbol artificial contamina menos por las veces que se reutilizará; sin embargo, estos adornos, que en su mayoría son importados y de plástico, tardarán alrededor en 500 años en desintegrarse, generando una importante huella de carbono también en su transportación.
En algunos lugares se puede adquirir un árbol natural en maceta, que posteriormente puedes regresar a la plantación o plantar en tu jardín.
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