Da Silva remarcó que aceptaría la investidura de candidato si así lo dictan las circunstancias, aunque aclaró que para 2022 tendrá 77 años
Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente de Brasil, sostuvo que no busca ser candidato del Partido de los Trabajadores (PT) en la elección presidencial de 2022.
En entrevista con la periodista española Ana Pastor para el programa El Objetivo, el líder brasileño aseguró que prefiere trabajar en la búsqueda de una persona en mejores condiciones para contender por la presidencia del país sudamericano.
Sin embargo, remarcó que aceptaría la investidura de candidato si así lo dictan las circunstancias, aunque aclaró que para 2022 tendrá 77 años y muchas cosas en qué pensar sobre su vida.
El exmandatario vaticinó que sus opositores, de cualquier manera, buscarán generar obstáculos en su contra.
Sobre la posibilidad de que Sérgio Moro sea candidato presidencial, Lula acusó que fracasará porque no es lo mismo hacer política escondido atrás de una toga que de manera frontal mediante el diálogo y el debate.
“Moro no será presidente, las personas piensan que es fácil hacer política”, señaló.
El Partido de los Trabajadores, añadió Lula, es un creador de Lula con una historia muy fuerte de acompañamiento al pueblo brasileño, con presencia importante en gubernaturas y alianzas con otros partidos políticos.
Además, Lula aseguró que el juez Sérgio Moro construyó enormes mentiras en su contra al acusarlo de estar involucrado en casos de corrupción con la empresa Petrobras, un agravio que será desmentido, sostuvo el exmandatario.
En cambio, Brasil utilizó la riqueza petrolera para invertir en programas sociales en beneficio de la ciudadanía, aseguró Lula en la entrevista.
Pastor confrontó al presidente sobre la sensación ciudadana de que en el gobierno del PT hubo corrupción, no obstante los buenos resultados en programas sociales y el avance en el desmantelamiento de la pobreza brasileña.
Lula respondió que hubo una cobertura mediática desigual en contra suya, sin procurar un equilibrio informativo que balanceara el panorama. “Yo no soy duro con la prensa, la prensa es dura conmigo”, señaló el expresidente.
Además, Lula se declaró en divergencia del 100 por ciento con el actual presidente de Brasil, Jair Bolosonaro, quien la semana pasada fue criticado por la también expresidenta Dilma Rousseff.
La exmandataria acusó al presidente de intimidar a la directora Petra Costa, autora del documental ‘Al filo de la democracia’ que analiza el arribo de Bolsonaro al poder.
