Muchos de los sectores que antes de esta crisis ofrecían trabajo con seguridad social, contrato y prestaciones, entre otros derechos, ahora solo otorgan el salario
Después de haber perdido más de 43 millones de empleos por la pandemia de Covid-19 en y que, de a poco, se han recuperado 29 millones, América Latina observa otras secuelas de esta larga enfermedad. Una de ellas es la “informalización de las ocupaciones previamente formales”, señala la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Es decir, muchos de los sectores que antes de esta crisis ofrecían trabajo con seguridad social, contrato y prestaciones, entre otros derechos, ahora solo otorgan el salario. El 70 por ciento de los nuevos puestos son así, según el reporte Empleo e informalidad en América Latina y el Caribe: Una recuperación insuficiente y desigual, elaborado por el organismo.
Todavía falta recobrar 14 millones de los puestos perdidos y hay un “riesgo latente” de que sigan el curso de la gran mayoría de los reactivados. Es prematuro afirmarlo, pondera la OIT en el documento, pero “esta probabilidad se eleva” en los hogares que han sufrido una disminución de ingresos y que, para compensarlos, las hijas o hijos jóvenes han entrado por primera vez al mercado de trabajo.