Ante el tiroteo ocurrido en una escuela de Uvalde, Texas, que dejó un saldo de 21 fallecidos, el fiscal general, Ken Paxton, propuso como una solución a futuros ataques, darle armas a los docentes
La tarde del martes el mundo se conmocionó por el tiroteo ocurrido en una escuela de Uvalde, Texas, que dejó un saldo de 21 fallecidos (19 alumnos de primaria y dos profesoras). Ante esta situación, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, propuso como una solución a futuros ataques, darle armas a los docentes.
Paxton aseguró que una forma de prevenir tiroteos en zonas escolares sería restringir los accesos a las áreas educativas; “que sea más difícil para las personas incluso entrar en estos puntos”, lo cual, según dijo, se lograría al tener “maestros y otros administradores que hayan recibido capacitación y que estén armados”.
El fiscal externó que los socorristas no tienen suficiente tiempo para llegar a prevenir un ataque, ya que los espacios para reaccionar son muy cortos, por ello las escuelas deberían de tener personas capacitadas en el uso de armas.
“(Prevenir ataques con socorristas) es simplemente no es posible, a menos que se tenga un oficial en cada escuela, pero la realidad es que no tenemos presupuesto suficiente para colocar a un policía en cada academia”, sentenció Paxton.
Finalmente, el fiscal de Texas reiteró que tener docentes armados, con la capacitación adecuada es la “mayor esperanza”. La propuesta de Ken Paxton fue respaldada por el senador republicano Ted Cruz, quien dijo que tener más agentes armados en las escuelas sería más efectivo que endurecer las leyes de control de armas.
La masacre registrada el día de ayer en Texas es la peor que se ha vivido en Estados Unidos en una década, desde el tiroteo de Sandy Hook en Newtown, Connecticut, donde murieron 20 niños y seis adultos.
