El expresidente de Perú, Pedro Castillo, pidió que se le deje en libertad y denunció que sufre “una venganza política” por chocar contra los intereses de grupos de poder económico y mediático
A través de una carta que publicó en su cuenta de Twitter, el expresidente de Perú, Pedro Castillo, aseguró que nunca cometió el delito de rebelión y calificó al actual Gobierno de “tiránico”, por usar las armas durante las manifestaciones que se han suscitado desde la destitución de Castillo y en las que han perdido la vida 28 personas.
“Yo no he cometido delito de conspiración. Quienes sí lo han hecho son aquellos que, desde el Congreso y otras instituciones”, señaló el exmandatario peruano.
Asimismo, externó que su familia tuvo que salir de Perú porque sus vidas estaban en peligro. No obstante, aseguró que él se mantendrá en su país para “afrontar cualquier proceso”.
En su escrito, Pedro Castillo, hizo del conocimiento público que, desde su detención, está incomunicado y no cuenta con acceso a un número telefónico para llamar a su familia.
“Les pido, señores jueces supremos, que reflexionen cómo esta injusta prisión preventiva que se me ha impuesto, solo ha servido para polarizar nuestro país, el cual requiere reconciliarse sobre la base de la injusticia.
“Todo este proceso y todo lo que se viene haciendo en mi contra, es parte de una venganza política, orquestada por haber chocado con los intereses de grupos del poder económico y mediático. Por lo tanto, pudo el cese al odio y se me deje en libertad por ser mi justo derecho”, escribió Pedro Castillo, desde la prisión de Barbadillo.
Cabe recordar que el miércoles 7 de diciembre, el pleno del Congreso de Perú destituyó a Castillo por “permanente incapacidad moral”, después de que el exmandatario anunciara la disolución del Legislativo para instaurar un Gobierno de emergencia, lo que fue calificado como un intento de golpe de Estado.
