Ucrania solicitó a los Estados Unidos el suministro de misiles de largo alcance para poder golpear la retaguardia enemiga y frustrar la ofensiva rusa
Ucrania solicitó a los Estados Unidos el suministro de misiles de largo alcance para poder golpear la retaguardia enemiga y frustrar la ofensiva general de Rusia, que acusa a la OTAN de buscar su derrota estratégica con el nuevo armamento para Kiev.
“Cada fase de la guerra requiere cierto tipo de armas. Ya existe una coalición de tanques. Ya hay conversaciones sobre misiles de largo alcance y suministro de aviones de combate”, aseguró Mikhaylo Podolyak, asesor presidencial ucraniano, en Twitter.
Después del compromiso occidental de enviar más de un centenar de tanques y carros de combate, Ucrania solicitó misiles de hasta 300 kilómetros de alcance, con los que podría golpear incluso la península de Crimea.
MISILES PRIMERO, AVIONES DESPUÉS
El presidente estadounidense, Joe Biden, entablará conversaciones con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelensky, luego de que en un primer momento negó la entrega de los aviones de guerra cazas F-16.
Sin embargo, externó que su Gobierno entregará otro paquete de 2,200 millones de dólares en ayuda militar para Kiev.
De acuerdo con el reporte de medios internacionales, Ucrania recibirá misiles con 150 kilómetros de alcance (GLSDB), además de equipos para los sistemas antiaéreos Patriot, munición de alta precisión y misiles antitanque Javelin.
Lo que no recibirá Ucrania son los ATACMS, misiles que pueden golpear objetivos a casi 300 kilómetros de distancia.
Precisamente, el diplomático Michael FcFaul, antiguo embajador de EUA en Moscú, pidió al Congreso que envíe los ATACMS para poder destruir los drones iraníes desplegados en Crimea.
Al respecto, la Inteligencia Militar ucraniana resaltó que los arsenales del Ejército ruso se encuentran ahora a sólo 80-120 kilómetros de las posiciones de Kiev.
“Para lanzar un ataque contra ellos, Ucrania necesita artillería de largo alcance”, explicó su portavoz, Vadim Skibitski.
Además, subrayó que dichos misiles, además de tanques y blindados, son fundamentales para que Kiev pueda lanzar una “rápida contraofensiva” antes de que las tropas rusas concluyan sus fortificaciones defensivas.