Durante el periodo de sede vacante, el cardenal camarlengo asumirá la administración temporal del Vaticano hasta la elección del próximo papa
El funeral del papa Francisco, quien falleció este lunes a los 88 años, deberá celebrarse entre el viernes 25 y el domingo 27 de abril, en cumplimiento con las normas que rigen las exequias papales. Así lo establece el documento Ordo Exsequiarum Romani Pontificis y la constitución apostólica Universi Dominici Gregis, que indican que las ceremonias deben realizarse entre el cuarto y el sexto día tras el fallecimiento.
La fecha exacta la determinará la primera congregación de cardenales, prevista para este martes. Este órgano es responsable de organizar el funeral y coordinar el proceso de elección del nuevo pontífice.
Francisco falleció tras más de dos meses de complicaciones respiratorias, que lo mantuvieron hospitalizado durante 38 días hasta el pasado 23 de marzo. Su muerte se confirmó oficialmente este lunes en su residencia del Vaticano, la Casa Santa Marta, por el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell.
Este mismo lunes se llevará a cabo el rito del sellado del apartamento del papa en la Casa Santa Marta y del apartamento del Palacio Apostólico, aunque este último nunca lo utilizó Francisco, quien eligió mantener su residencia en la Casa Santa Marta desde el inicio de su pontificado.
El féretro será velado en la capilla de su apartamento y trasladado el miércoles a la Basílica de San Pedro, donde será expuesto al público antes del funeral. Como lo establece el protocolo vaticano, el camarlengo también deberá proceder a la anulación del Anillo del Pescador y del sello pontificio, con el fin de impedir la emisión de nuevos documentos en nombre del papa fallecido.
Durante el periodo de sede vacante, el cardenal camarlengo asumirá la administración temporal del Vaticano hasta la elección del próximo papa.