Pájaros en el alambre por doquier…

El estado de Querétaro no ha sido ajeno a la adquisición de equipos que pudieron haber sido utilizados para espiar; baste traer a la memoria que el gobierno estatal encabezado por José Calzada Rovirosa compró un equipamiento para operaciones de campo, que sería instalado en un vehículo para la Unidad Estratégica de Combate al Secuestro (UECS); solicitado por la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado de Querétaro.

El actual secretario de Gobierno, Juan Martín Granados Torres, dijo en su momento que dicha unidad con sistema de radiocomunicación y supuesto equipo de espionaje la había recibido la presente administración en el proceso de entrega-recepción y descartó que hubiera sido utilizada porque -subrayó-  la tecnología que requería implicaba un costo que no pagarían.

El procurador (ahora Fiscal General del Estado) Alejandro Echeverría Cornejo declaró también que durante la entrega-recepción les había sido entregada la camioneta con equipo que pudo ser utilizado para espiar, aunque subrayó que no había registro de órdenes judiciales que hubieran autorizado dichas acciones.

El equipo era un “CSV vehículo de comando y seguimiento-equipamiento especial”, comprado ─mediante la adjudicación directa SA-922011997-N31-2012, a EYETECH SOLUTIONS, S.A de C.V; cuyo Director General era Yaniv D. Zangilevitch, de origen israelí─ con recursos federales del Subsidio de Apoyos a Entidades Federativas en materia de Seguridad Pública (PROASP) 2012, dentro del programa “Instrumentación de la Estrategia en el Combate al Secuestro”.

Asimismo, el gobierno estatal adquirió ─el 22 de junio de 2011─ al Corporativo Bina, S.A. de C.V., dos equipos analizadores de espectro y redes inalámbricas; por los cuales pagó 15 millones 900 mil pesos. El contacto para esta compra fue precisamente Yaniv D. Zangilevitch.

Por otro lado, cabe recordar también que en julio de 2015 Wikileaks dio a conocer correos electrónicos en los que presuntamente el gobierno de Querétaro había contratado los servicios de la empresa italiana de tecnología de vigilancia Hacking Team; hecho negado por las autoridades de la anterior administración.

Los correos mencionaban como una de las intermediarias a la empresa Binah Lab, nombre similar al que aparece en una de las facturas de la adquisición  del equipo de espectro y redes inalámbricas, por parte del gobierno estatal: Corporativo Bina.

En otro caso, en su Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública del Segundo Semestre de 2013, la Entidad Superior de Fiscalización del Estado (ESFE) detectó irregularidades en la adjudicación directa del contrato SAY/DJ352/2013 “Solución de seguridad en voz y dato de grado militar punto a punto” (licencias) al proveedor Paulo César Sixto Tapia, por un monto de 4 millones 988 mil pesos; debido a que debió hacerse  mediante licitación pública.

Asimismo, la auditoría reveló que 80 licencias de origen israelí del software de seguridad en voz y dato de grado militar habían sido adquiridas con un sobrecosto de 3 millones 585 mil 692 pesos sobre el valor de mercado; y, además, la administración municipal ─encabezada entonces por Antonio Zapata─ “omitió ubicar físicamente la instalación y uso de las 80 licencias del software adquirido.

Zapata Guerrero declaró que el equipo era para protección de datos, no para espiar; pero, incluso, el 23 de octubre de 2015, Quadratín Querétaro (https://queretaro.quadratin.com.mx/Desactivan-equipo-de-espionaje-de-Corregidora/) publicó declaraciones del alcalde Mauricio Kuri sobre el equipo adquirido por su antecesor: “Ese equipo de espionaje se dio de baja antes de que yo entrara. Es una observación que nosotros hicimos ante la Contraloría y eso será tema que tendrá que revisar”.

Así pues, pájaros en el alambre parece haber por doquier… y como claramente expresó el propio titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto Castillo, “hay muchos estados que cuentan con este tipo de sistemas, no vinculados directamente con Pegasus, y creo que será importante poder generar algún tipo de investigación interior, porque el planteamiento del presidente López Obrador es muy claro: en un sistema democrático no puede haber espionaje a la ciudadanía”.