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¿Un lobo con piel de oveja?

No, no se trata de una investigación periodística; la propia autora de “El Rey del Cash”, Elena Chávez -aunque periodista- así lo reconoce: “Lo dicho en estas páginas es mi verdad, mi historia, es una catarsis hacia la libertad”.

Catarsis, según la Real Academia de la Lengua proviene de kátharsis, que significa “purga”: “Purificación, liberación o transformación interior suscitadas por una experiencia vital profunda”.

Se trata de un ejercicio de libertad de expresión, y así lo reconoció el propio presidente Andrés Manuel López Obrador la semana pasada en una de sus mañaneras; aunque después se enfocó en que no muestra pruebas y se trata de una “deshonestidad intelectual”. Días antes había circunscrito el tema a un ámbito “personal y sentimental” en el que no se metería.

La descripción es una verdadera erupción de emociones por parte de la periodista; evidentemente no expone ahí dogmas que deban asumirse como verdades absolutas… “El Rey del Cash” está escrito, como ella también consigna en las páginas de la obra, por alguien que miraba los toros desde la barrera, y ¡ese es precisamente el valor de su testimonio: ella estuvo presente en esas corridas de toros!

Sus narraciones sobre la forma en la que presuntamente el hoy Presidente de la República ha financiado su movimiento a través de los años se dieron a partir de su vínculo matrimonial durante 18 años con César Yáñez, un personaje cercano a Andrés Manuel López Obrador, vocero y operador político; actual Subsecretario de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación.

Ella expone incluso secretos de alcoba; revela lo que escuchó y vio en el círculo más próximo a López Obrador; describe su verdadero rostro, porque estuvo ahí… como una sombra que los protagonistas en esas escenas jamás imaginaron que años después cobraría vida propia.

¿Alguien puede decirse pasmado o atónito de lo pormenorizado en la obra? ¡Claro que no!, mucho se ha dicho, investigado y publicado; el propio López Obrador lo dijo públicamente cuando se difundió el video donde apareció su hermano Pío recibendo dinero de un funcionario, David León:

“Son aportaciones para fortalecer el movimiento en momentos en que la gente era la que apoyaba básicamente. Nosotros hemos venido luchando durante muchos años y nos ha financiado el pueblo, como ha sucedido cuando se han llevado a cabo revoluciones (…) Todas las revoluciones se hacen así, con la cooperación de la gente. Yo puedo comentarles que a mí me apoyaba la gente, había una cuenta abierta en un banco, en Banorte, en donde depositaban dinero para mantenernos. Yo obtenía mi sueldo de esa forma y la gente depositaba ahí. Esto, por años, hasta que nos clausuraron la cuenta”.

¿Qué no muchos mexicanos nos hemos preguntado de qué ha vivido López Obrador a través de los años? Pues ahí está Elena Chávez explicándolo: ¡del cash en sobres amarillos y maletas, de los testaferros recaudadores, de los padrinos, de las arcas del Distrito Federal, de las aportaciones “voluntarias” de los servidores públicos de todos los niveles, de nóminas fantasma!

Y quienes esperan encontrar pruebas, no las hallarán, advierte: “Nunca, jamás, nadie va a encontrar un video o algún recibo firmado por él, porque entre las reglas acordadas con su grupo selecto, entre los que figuraba César Yáñez, estaba la de entregar mensualmente los recursos a Alejandro Esquer, pero solo en efectivo”.

Y, sin embargo, habrá quienes prefieran mantener los ojos cerrados y recitar junto con AMLO La Calumnia de Ruben Darío:

“Puede una gota de lodo
sobre un diamante caer;
puede también de este modo
su fulgor oscurecer;
pero aunque el diamante todo
se encuentre de fango lleno,
el valor que lo hace bueno
no perderá ni un instante,
y ha de ser siempre diamante
por más que lo manche el cieno”

Pero habrá quienes ratifiquen que lo que hoy estamos viviendo en el país, es lo mismo -incluso peor- que lo que hemos padecido los mexicanos por décadas… aunque ahora con una estrategia distinta, encabezada por un lobo con piel de oveja que no hace sino repetir que su lema es “no mentir, no robar y no traicionar al pueblo”… aunque en los hechos sea precisamente lo que está sucediendo.