A partir de los útiles aportes de la Dra. Urith N. Ramírez Mena, en mi artículo anterior, que compartí en mis redes sociales de Facebook y Linkedin, el tema “Educación inmersiva: ciencia o mercado, ¿quién dicta el futuro?”, planteamos una cuestión clave: la dinámica de poder en la incorporación de tecnologías digitales en la educación. ¿Nos encontramos ante un panorama en el que la tecnología impone las reglas o es la educación la que debe orientar su uso?
La Dra. Ramírez Mena resalta la importancia de un enfoque equilibrado, donde la industria tecnológica y las instituciones educativas colaboren para un uso reflexivo de las tecnologías. Esto nos lleva a reflexionar sobre el papel de los líderes educativos en la creación de políticas que promuevan un uso crítico y consciente de la tecnología, evitando que se convierta en un mero negocio.
Los documentos revisados, como “More than tools: making sense of the ongoing digitalization of higher education”, de Dussel y Willias (2023); “La vinculación de políticas públicas para la integración de la Inteligencia Artificial en la educación mexicana”, de Herrera-Aguilar (2022), y “Los imaginarios sociotécnicos de la política educativa digital en México”, de Dussel y Willias (2023), proporcionan un marco para entender la complejidad de la integración de tecnologías digitales en la educación.
Dichos textos destacan la necesidad de una colaboración entre diferentes actores para crear un ecosistema educativo que fomente la innovación tecnológica y promueva un uso crítico y consciente de estas herramientas. Estos trabajos subrayan cómo la digitalización de la educación superior se ha convertido en un negocio multimillonario, con corporaciones tecnológicas globales ejerciendo una influencia creciente sobre las universidades locales. La naturaleza impulsada por el mercado de la tecnología en la educación superior tiene implicaciones que van más allá de la simple provisión de recursos a los consumidores universitarios. Por ejemplo, la organización y administración de las universidades están cada vez más moldeadas por sistemas proporcionados comercialmente, basados en modelos desarrollados para negocios e industrias. Esto plantea preguntas críticas sobre cómo las filosofías de la pedagogía y el aprendizaje están “incorporados” en el diseño codificado del software que las universidades compran y utilizan, junto con cualquier consideración correspondiente para la equidad, la crítica y otros ideales que podrían verse como características fundamentales tradicionales de la educación superior.
La pregunta que surge es: ¿cómo podemos garantizar que la tecnología en la educación sirva a los intereses de los estudiantes y no solo a los de la industria? La respuesta parece residir en la creación de marcos regulatorios y directrices que prioricen la calidad y la equidad en la educación digital. Esto implica un esfuerzo coordinado entre todos los actores involucrados para asegurar que la educación inmersiva y la tecnología educativa se desarrollen de una manera verdaderamente beneficiosa para el futuro de nuestros estudiantes y la sociedad en general.
En conclusión, el desafío reside en equilibrar la innovación tecnológica con una visión pedagógica que coloque al estudiante en el centro del proceso educativo, lo cual requiere un esfuerzo coordinado entre todos los actores involucrados para asegurar que la educación inmersiva y la tecnología educativa se desarrollen de una manera que sea verdaderamente beneficiosa para el futuro de nuestros estudiantes y la sociedad en general. Es imperativo que los líderes educativos, tecnológicos y políticos trabajen juntos para establecer un marco que promueva un uso reflexivo y equitativo de la tecnología en la educación.
Referencias
Castañeda, L., & Selwyn, N. (2018). More than tools? Making sense of the ongoing digitizations of higher education. International Journal of Educational Technology in Higher Education, 15(1), 1-10.
Dussel, I., & Williams, F. (2023). Los imaginarios sociotécnicos de la política educativa digital en México (2012-2022). Profesorado, Revista de Currículum y Formación del Profesorado, 27(1), 39-60.
Herrera-Aguilar, M. (2022). La vinculación de políticas públicas para la integración de la inteligencia artificial en la educación mexicana. Communication, technologies et développement, (11).