La diputada federal de Morena Beatriz Robles pidió que las autoridades revisen las condiciones de la empresa minera canadiense ubicada en la comunidad de San Martín, municipio de Colón
Beatriz Robles Gutiérrez, diputada federal por Morena, exhortó a las autoridades municipales, estatales y federales a revisar la situación que guarda la compañía minera canadiense Peña de Bernal en la comunidad San Martín, en el municipio de Colón; pues -asegura- más de 100 viviendas se han visto afectadas por las explosiones provocadas para extraer oro y plata.
Refirió que solicitó al Servicio Geológico Mexicano realizar un estudio de la mina para determinar si hay posibles daños al subsuelo, así como también pidió un estudio de agua pues los pobladores tienen miedo de consumir -aseguró- el vital líquido contaminado.
María del Carmen Anaya Estévez, abogada del ejido San Martín, recordó que desde 2017 fueron afectadas 30 hectáreas de las tierras ejidales de uso común, lo que aproximadamente asciende en daños a 80 millones de pesos.
“Estas tierras constituyen el sustento de la vida del ejido, es decir, estas tierras se explotan de manera colectiva por 116 ejidatarios que aprovechan la leña y los cactus, nopales y la vegetación de los cerros; pero a raíz de la mina, el cerro se ha visto fracturado. Ya no son libres de pasar por ahí, porque hay el peligro de que colapse por completo”.
Afirmó que hay afectaciones en aproximadamente 100 viviendas y la gente tiene miedo de que estas colapsen porque todo el tiempo está temblando, inclusive, los niños y adultos están dañados, agregó, psicológicamente por la psicosis de que creen que está temblando y la empresa minera dice que retumba porque son daños por la composición del suelo.
“Hemos visto que las grietas han crecido y aunque la mina se ha comprometido a cuidar ese patrimonio, no lo ha hecho”.
Aseguró que la compañía canadiense está sacando un mineral rico con el que podría beneficiarse a la población, pero tampoco emplean a la gente de ahí.
“Con lo que han extraído era para que la comunidad estuviera bien socialmente, ellos dicen que aportan ingresos económicos puesto que les dan empleos; pero esto es completamente falso, los ejidatarios y pobladores no se dedican a la explotación minera, los que trabajando ahí vienen de otros estados”.
