Gloria reconoce que es parte de la población más vulnerable, por lo que ha seguido las recomendaciones de la autoridad
Gloria y Enrique, de 66 y 70 años, respectivamente, son esposos y ambos padecen diabetes e hipertensión. Ella reconoce que forman parte de la población más vulnerable para contraer el virus SARS CoV-2, causante de Covid-19; por ello, aunque le entristece haber perdido la libertad de llevar su vida diaria con normalidad, asegura que vale la pena quedarse en casa.
A diferencia de Enrique, Gloria menciona que quien más ha sentido el aislamiento en la vivienda es ella, pues su esposo regularmente se queda en casa. Antes de la emergencia sanitaria, narra, sus actividades comenzaban a las 6:30 de la mañana, cuando salía al gimnasio; a esta le seguían su asistencia a misa y un desayuno con las amistades. Hoy esto ya no es posible.
“Al principio, créeme que sí me soltaba a llorar. Me daba una tristeza fuerte porque, el saber ya no podemos ni abrazarnos ni nada, y esas palabras de aliento que te dan tus amistades, pues como que te nutre. A mí sí me pegó, pero como nosotros estábamos acostumbrados a que yo era la única que en la mañana salía, mi esposo se queda aquí, pues llegaba y normal. No hemos tenido, como dicen en las noticias, cosas de pleitos”, relata.
La rutina que seguía cambió de un momento a otro, al grado de que sus frecuentes salidas al día se redujeron, en el último mes, a una sola; esta fue al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, en la cual ambos recibieron una receta para surtirla en mayo y junio próximos.
“Mis hijos son los que vienen, una de mis hijas está aquí, viene y es la que nos acerca todo. Hemos comprado carne, la hemos congelado y lo que sí necesita, pan, las tortillas, y es la que nos hace favor de acercarnos todo. (…) Tenemos la misa a las 11 de la mañana, estamos todos aquí escuchando la misa; el ejercicio lo veo yo por Facebook, pongo mi ejercicio a las cuatro o cinco de la tarde; una novia de mi nieto me puso una aplicación para yoga, hay ocasiones que la hago en la mañana y sí, tratamos de no salir”, dice.