El Sistema Penitenciario de Querétaro informó que se detectaron dos casos positivos de COVID-19 en el Cereso Varonil de San José el Alto
La Comisión Estatal del Sistema Penitenciario de Querétaro informó que se detectaron dos casos positivos de COVID-19 en personas privadas de la libertad del Centro Penitenciario Varonil CP1 de San José el Alto, Querétaro.
Mediante un comunicado el Sistema Penitenciario señaló que, en seguimiento a esta serie de protocolos y medidas, fueron detectadas dos personas con síntomas asociados a la enfermedad y de inmediato fueron canalizadas para brindarles atención médica, tomar sus muestras y aplicar la prueba de confirmación de COVID-19.
Los resultados fueron entregados por la Secretaría de Salud del Estado de Querétaro (SESEQ) el 23 de julio, los cuales fueron positivos.
Los casos fueron detectados a partir de las acciones de prevención implementadas y establecidas en el acuerdo de salubridad dictados en marzo por la SESEQ, en correspondencia con los acuerdos de la autoridad sanitaria federal, por lo que se monitorea permanentemente a la población penitenciaria, al personal administrativo y técnico, así como a custodios y policías procesales.
El sistema detalló que cuando se obtuvo la confirmación, las personas ya estaban aisladas de cualquier contacto físico con el resto de las personas privadas de la libertad.
El personal médico realizó la cadena de seguimiento con las personas que tuvieron contacto en días anteriores, a quienes también se les aplicaron los tratamientos de salubridad respectivos.
Al momento no existe ningún otro caso detectado, las personas ubicadas en la posible cadena de contagio se encuentran en vigilancia y sin síntoma alguno, en tanto que las personas contagiadas se encuentran en buen estado de salud y bajo estricta supervisión, detalló el sistema.
De igual modo, la dependencia señaló que se han reforzado las medidas de salubridad, con el objetivo de verificar a la población penitenciaria e identificar oportunamente si hubiera un nuevo contagio.
Acciones que se llevan a cabo por el personal de salud del Sistema Penitenciario en coordinación con Servicios de Salud del Estado.