Axel Uriegas Duarte, director de cine, afirmó que al desaparecer los fideicomisos para el séptimo arte, el cine volverá a la decadencia del cine de ficheras de los años 70 y 80, o a las producciones de baja calidad de ‘videohome’ de los años 90
Tras la desaparición del Fondo de Inversión y Estímulos al Cine (Fidecine), cineastas queretanos difirieron sobre el tema, pues mientras hay quienes consideran que con su extinción habrá un retroceso, otros aseguran que se acabará la centralización de los recursos.
Esto, luego de que la semana pasada en la Cámara de Diputados a nivel federal se votó a favor de la extinción de 109 fondos y fideicomisos relacionados con salud, deporte, ciencia, cultura, medio ambiente y tecnología, entre otros.
Axel Uriegas Duarte, director de cine, afirmó que al desaparecer los fideicomisos para el séptimo arte, el cine volverá a la decadencia del cine de ficheras de los años 70 y 80, o a las producciones de baja calidad de ‘videohome’ de los años 90.
“Si tú le quitas a uno de los pocos gremios que sabe trabajar en equipo las herramientas, se va a perder el poco cine que hemos podido rescatar del que existía antes de ‘Lamineros’ y ‘Ficheras’, ‘Los Albañiles’ y ‘La Risa en Vacaciones 1’, ‘2’ y ‘3’.
“Si algo tiene México es a los mejores fotógrafos y la única forma de mejorar en algo es con base de prueba y error, prueba y error, pero si tú le quitas la oportunidad a la gente de seguir haciendo cosas, no vas a mejorar (…) el cine no va a desaparecer, simplemente se va a perder el conocimiento adquirido, porque se perderá la oportunidad de hacer más y más cine”.
Alfonso Antonio Jiménez Ramírez, cineasta y director de la Escuela Libre de Cine, aseguró que con la desaparición de los fideicomisos, a este sector se le abre una oportunidad para acabar con la corrupción y centralización de los recursos.
“Es la oportunidad de acabar con los amiguísimos, los dedazos, el clientelismo y la corrupción, y todo este lastre no lo quitas haciendo fideicomiso, porque tiene menor control institucional; entonces, su eliminación, puede ser una oportunidad para reestructurar las instituciones, refuncionalizarlas en beneficio de los objetivos que se plantearon; es momento para que todas las instituciones se replanteen cuál es su función y sobre todo para crear las condiciones y para que haya una producción, distribución y resguardo del acervo, etcétera”.