El secretario de Salud del estado de Querétaro aseguró que en las dos semanas y media previas ha mostrado una disminución, ya que, aunque se tuvo un pico de 269 pacientes hospitalizados el 3 de septiembre, actualmente se tienen 176
Debido a la detección masiva de casos de Covid-19, el semáforo de riesgo epidemiológico de coronavirus, emitido por el gobierno federal, cambió de amarillo a naranja, explicó el secretario de Salud del estado de Querétaro, Julio César Ramírez Argüello, quien acotó que, no obstante, la capacidad hospitalaria permite continuar en el color amarillo.
En su comparecencia con motivo de la glosa por el quinto Informe de Gobierno del jefe del Ejecutivo del estado, Francisco Domínguez Servién, añadió, con respecto a este último indicador, que en las dos semanas y media previas ha mostrado una disminución, ya que, aunque se tuvo un pico de 269 pacientes hospitalizados el 3 de septiembre, actualmente se tienen 176 pacientes.
“Nos da cierta holgura en poder manejar y abrir ciertas actividades con los aforos permitidos, con la vigilancia sanitaria, (…) y que sí, establecimiento que no cumpla con el aforo ni las medidas ni los protocolos, obligatoriamente se tendrá que cerrar. Entonces, sí tenemos la holgura, estamos detectando más, por eso cambió el semáforo, por la detección masiva que tenemos, pero nuestra capacidad hospitalaria nos da pauta para decir ‘lo podemos seguir haciendo’”, manifestó.
Sobre los cobros excesivos en hospitales privados para la atención de pacientes con Covid-19, indicó que la Secretaría de Salud estatal no tiene injerencia ni influencia en estos temas; por lo que, afirmó, le corresponde a la Procuraduría Federal del Consumidor. Aseguró que la dependencia a su cargo vigila que los nosocomios particulares cumplan con los protocolos y lineamientos establecidos.
Ante los señalamientos en su contra por presunto hostigamiento laboral hacia personal de salud, el secretario puntualizó que ni él ni su equipo de trabajo ha incurrido en una situación así; por el contario, dijo, se ha acercado con los trabajadores para pedirles que le digan sus necesidades.
“Es mi única función: proveerles y darles el apapacho y la protección que ellos se merecen”, enfatizó.
