María, con 32 semanas de embarazo y diagnosticada con Covid-19, llegó inconsciente al HGR No. 2, El Marqués, donde médicos decidieron intubarla y realizarle una cesárea de emergencia; esperó más de un mes para conocer a Tadeo, quien luego de 68 días hospitalizado, fue dado de alta
La madre de Tadeo, María, presentó tos durante su embarazo y se percató que el bebé no tenía movimiento, por lo que acudió a Urgencias de Tococirugía del Hospital General Regional No. 1 de Querétaro para ser atendida, donde le dijeron que era paciente sospechosa de Covid-19.
Luego de estar hospitalizada por dos días, su estado de salud se complicó y fue necesario su traslado al Hospital General Regional (HGR) No. 2, El Marqués. Al llegar a dicho nosocomio quedó inconsciente, por lo que los médicos decidieron intubarla e ingresarla de inmediato a quirófano para realizarse una cesárea de emergencia, con tan solo 32 semanas de gestación.
El estado de salud de madre e hijo se reportaba como grave; al menor se le descartó estar contagiado de Covid-19, por lo que estuvo aislado de su madre.
De acuerdo con la doctora Janette Castillo Martínez, especialista neonatóloga, Tadeo presentó diversas complicaciones debido a su prematurez, como infecciones que fueron atacadas con antibióticos e inestabilidad respiratoria, por lo que debió permanecer intubado por tres semanas hasta que logró respirar por sí mismo.
“El pequeño estaba muy delicado, al igual que su mamá, los médicos nos comunicábamos y los pronósticos eran reservados”, comentó la médica tratante.
Por su parte, María esperó más de un mes para que poder conocer a su pequeño.
La doctora Castillo afirmó que el pequeño evolucionó favorablemente, sin embargo, se tiene que mantener en constante chequeo por especialistas para dar seguimiento a su crecimiento y detectar posibles secuelas por el nacimiento tan prematuro.