Paul Ospital señaló que el superdelegado de Bienestar no supo controlar temas como la pobreza y el desempleo
Gilberto Herrera Ruiz no tendrá cara para solicitar el voto a los electores, ya que de ser quien contienda por Morena en la elección 2020-2021 para la gubernatura habrá de dar explicaciones sobre las cifras económicas que siguen en retroceso en la entidad, entre las que destacan más pobreza y desempleo, temas que no supo controlar desde su trinchera como “superdelegado” de Bienestar.
“Tiene un reto mayúsculo. Yo no me imagino las puertas que va a tocar y lo que le va a contestar la gente. Probablemente le abra un campesino que le va a recordar que le recortaron prácticamente a la mitad los apoyos para el campo. Una ama de casa le va a recordar que le quitaron la estancia infantil para sus hijos. Y en la siguiente calle un joven le va a reclamar que le robó su futuro sin Instituto Emprendedor. Una madre con cáncer, la cancelación del Seguro Popular, ya que hoy pende su vida de un hilo por falta de atención y medicamentos”, dijo el dirigente del PRI en la entidad, Paul Ospital Carrera.
“Yo no sé con qué cara se va atrever a tocar puertas, si fue justamente el encargado de todos los recortes del gobierno federal para el estado de Querétaro”, agregó.
Será, entonces, su fracaso político, argumentó, al considerarlo un candidato débil y tras prometer que los candidatos que emanen del PRI sí respetarán a las instituciones electorales del país, ya su partido las creó desde que gobernó para beneficio de México.
“Todos aspiramos a campañas de propuestas, de plataforma y de debate, nunca estaremos a favor de la guerra sucia en el partido. Tenemos los mejores cuadros. Mucho menos denostaremos a las instituciones”.
Al referirse al proceso interno del PRI para definir sus propias candidaturas explicó que el Consejo Político Estatal sesionará en breve para votar el método de selección de candidatas y candidatos, y la estrategia para remontar consistirá en mucho trabajo, unidad y propuestas claras.
