El presidente de la Fundación Quindel, Benjamín Delgado, admitió que la disminución de las pruebas para detectar VIH-SIDA podría causar un crisis en el tratamiento de la enfermedad
Debido a la emergencia sanitaria por COVID-19, el Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/Sida (Censida) disminuyó hasta en un 59 por ciento las pruebas de detección de VIH durante 2020, dijo el presidente de la Fundación Quindel, Benjamín Delgado, quien advirtió que esto puede generar una crisis para el tratamiento del padecimiento.
Luego de presentar la “Guía de acompañamiento para mujeres de recién diagnóstico de VIH/Sida”, cuyo objetivo es ofrecer una herramienta para reducir el estrés que conlleva un diagnóstico positivo del virus, el activista agregó que el decremento en la detección también se debe a la reducción del presupuesto para el Censida.
“La cifra ahorita, en el Día Mundial de la Lucha contra el Sida, es que se ha reducido un 59, casi un 60 por ciento la detección. Esto pues es alarmante porque es una bomba de tiempo, si dejamos de tener detección de VIH, en algunos años vamos a tener alguna crisis muy seria para el tratamiento; van a aumentar significativamente las personas que requieran tratamiento”, refirió.
Agregó que la situación anterior también ha influido en una disminución en los diagnósticos de VIH. En este sentido, el también activista Josué Quino mencionó que, al no haber pruebas rápidas de detección de VIH que se apliquen a la comunidad LGBT “en sus espacios y en sus horarios”, se desconoce el momento en que se dará un repunte de las cifras.
“Podemos decir, felizmente dar las cifras muy alegres y decir ‘no, pues es que la incidencia bajó, es que de casos hay poquitos y lo que sea’, pero quiero pasar en el momento en que se comiencen a realizar pruebas en los espacios y en los horarios en que la comunidad LGBT realmente está asistiendo”, cuestionó.
Benjamín Delgado recordó que, al no haber recursos presupuestales para las organizaciones civiles, estas tampoco pueden activar mecanismos de prevención y grupos de apoyo. Recordó que en 2012 y 2013, con financiamiento de fondos internacionales, se realizaron estrategias efectivas.
