Celia Maya García, candidata de Morena a la gubernatura del estado de Querétaro, se comprometió a revisar la situación de los ejidatarios en la zona de Peña Colorada
La candidata del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la gubernatura del estado de Querétaro, Celia Maya García, dijo que revisará lo relativo a las tierras de ejidatarios y el tema de Peña Colorada “con diálogo y buena voluntad para sacarlos adelante. Habrá certidumbre jurídica en los juicios agrarios, ya que llevan años sin solución y deben resolverse lo más pronto posible”.
De acuerdo con un boletín de prensa emitido por su equipo de campaña, durante una reunión con la Central Campesina Cardenista (CCC) en el ejido San Pablo, donde fue acompañada por el candidato morenista a la presidencia municipal de Querétaro, Arturo Maximiliano García; la presidenta de la CCC y del Ejido San Pablo, Rosi Vidal; el comisariado ejidal de Jurica, Bernardino Ferrusca; la candidata a diputada local por el Distrito I, Frida González Loyola, y el candidato a diputado local por el Distrito XIII, Mauricio Zumaya Arana, Celia Maya se comprometió a resolver el problema del agua, la captación de esta y a aplicar un programa de reforestación.
“Vamos a repartir el gasto público como nunca se había hecho, sin contraer una deuda pública. Vamos a caminar de la mano de la justicia social con la confianza de los ciudadanos y vamos a ver todo lo relativo con sus tierras y Peña Colorada, con diálogo y buena voluntad para sacarlos adelante”, expuso la abanderada de Morena.
En su intervención, Bernardino Ferrusca manifestó que “quieren que sea un área natural protegida Peña Colorada, sin considerarnos las instituciones ni los grupos de ambientalistas. No estamos peleados con la naturaleza, ni con el medio ambiente, pero el consumar este decreto sería un atropello. Los legítimos dueños somos nosotros y nos regimos con acuerdos internos dentro de la asamblea ejidal. Nos vamos a sentar en la mesa para encontrar la mejor solución a nuestra demanda”.
Rosi Vidal, por su parte, expresó que el sector ejidal necesita una perspectiva económica y ambiental con mecanismos de solución que se amplifiquen en el ámbito legislativo.
