Valeria Guerrero Ángeles, titular del Instituto Queretano de la Mujer (IQM), recordó que el tema de los recursos también se trabajó para que las administraciones adquieran el mayor número de herramientas para seguir fortaleciéndose de manera económica, con recurso humano y material estos espacios
Durante los últimos seis años, el Instituto Queretano de la Mujer trabajó para que la próxima administración estatal y las municipales cuenten con las herramientas necesarias para que realicen un plan de desarrollo con perspectiva de género, afirmó Valeria Guerrero Ángeles, titular de la dependencia.
“Yo creo que las administraciones entrantes tanto la estatal como la de los municipios van a contar con todas las herramientas que generamos a lo largo de seis años, incluso una reforma a la ley de planeació; por lo que tendrán que hacer su plan de desarrollo estatal y municipal con perspectiva de género y eso incluye que debe haber un presupuesto”.
Recordó que el tema de los recursos también se trabajó para que las administraciones adquieran el mayor número de herramientas para seguir fortaleciéndose de manera económica, con recurso humano y material estos espacios.
“El instituto cuenta con apoyo legal y técnico por lo que seguramente se les estará apoyando a las próximas administraciones en este proceso de planeación”.
Sobre si considera viable elevar a rango de Secretaría el IQM, Guerrero Ángeles refirió que este es un tema que debe discutir la administración entrante.
“Creo que ahí hay que hacer una evaluación de la autonomía y los recursos financieros con los que contaría; en caso de que se eleve a secretaría se tendría que hacer una reforma legal, creo que lo importante es que se deja una institución sólida dejando de ser el espacios de entretenimiento de las mujeres”.
La directora refirió que otro gran logro de la administración es el nuevo Refugio para Mujeres Víctimas de Violencia NUJU que recientemente inauguró el mandatario estatal, Francisco Domínguez Servién, el cual albergará hasta a 25 familias.
“Este albergue es un modelo único a nivel nacional, no solamente por su construcción, sino por su modelo de operación, el cual no solo busca resguardar a las familias de mujeres víctimas de violencia, sino que en su estancia se les restituyan todos los derechos que le fueron vulnerados y que en su egreso cuenten con trabajo y un lugar donde vivir”.
