El director de Mediación del municipio de Querétaro, Marco Antonio Colín Molina, admitió que es necesario crear un reglamento para atender las problemáticas de convivencia al interior de los condominios
Tras concluir los cursos de capacitación que recibieron administradores e integrantes de mesas directivas de condominios, el titular de la Dirección de Mediación del municipio de Querétaro, Marco Antonio Colín Molina, reconoció que existe la necesidad de implementar un reglamento municipal que aborde las problemáticas de convivencia al interior del régimen condominal; propuesta en la que ya trabajan e incluirán a otras áreas, por ejemplo, la Dirección de Desarrollo Urbano que se encarga del proceso de entrega-recepción.
“Definitivamente van a tener que incluirse algunas otras áreas del municipio, porque la atención al régimen condominal no se limita a la Dirección de Mediación. Vamos a tener acercamiento con otras dependencias, por ejemplo, tendremos que tener un contacto muy directo con Desarrollo Urbano de la Secretaría de Desarrollo Sostenible para el tema de la entrega-recepción, que se haga a la mesa directiva de los condóminos; pero la propuesta vertebral de ese reglamento sí surgirá de esta Dirección”.
Agregó que también pudiera integrarse al Departamento de Supervisión a la Construcción, que depende de la Dirección de Desarrollo Urbano, y con el Departamento de Juzgados Cívicos Municipales que está a cargo de la Oficina del Abogado General del municipio de Querétaro.
El director informó que los cursos de orientación y asesoría para la intervención de conflictos en el ámbito condominal se brindaron de manera conjunta con el Tribunal Superior de Justicia, donde participaron representantes de 348 condominios; cifra que superó la meta inicial de 250, y fueron beneficiadas más de 26 mil personas que habitan en viviendas de esta modalidad.
“Los 10 grupos que iniciaron su capacitación el pasado 14 de junio y concluyeron el 1 de septiembre se les capacitó a través de herramientas y estrategias para abordar de manera adecuada los conflictos que pudieran suscitarse al interior de estos condominios, por ejemplo, conflictos generados por ruido, mascotas y problemáticas de convivencia en general”.