Acuden a honrar a sus difuntos

Con motivo del Día de Muertos, queretanos acudieron a visitar las tumbas de sus difuntos. Les llevaron flores y ofrendas para recordar lo que disfrutaban en vida

Una guía de flores color naranja, tres arreglos de flor de cempasúchil, veladoras y una fotografía adornan la sepultura de la señora María del Carmen Soto, quien falleció hace 10 años y recibió la visita por parte de sus familiares, entre ellos, la de su hija Mona Murillo.

Mona Murillo señaló que la visita al panteón es una tradición que su mamá les inculcó a ella y a sus 10 hermanos.

En el Día de Muertos, en compañía de sus familiares, rezó y recordó todos los momentos que vivió en compañía de su mamá. Para ello, explicó que desde el fin de semana limpió y quitó la hierba que crece alrededor de la sepultura.

“De tradición nos gusta honrar a nuestros difuntos, recordarlos con mucho cariño. Mi madre se pasaba todo el día en el panteón acompañando a sus difuntos, nosotros lo seguimos haciendo, pero ahorita por la pandemia vamos a acatar el horario que se permite”, dijo.

Reconoció que estos últimos años no han sido fáciles para ella, pues, a consecuencia del coronavirus, su esposo Ernesto y su hijo Edgar perdieron la vida, el 4 y el 9 de junio del 2020, respectivamente.

En este sentido, indicó que en el altar de muertos que colocó en su casa se encuentran las fotografías de 10 de sus familiares, así como sus bebidas y platillos favoritos.

“Para mi mamá, la cajeta, porque era de Celaya; para mi papá, sus cigarritos y su vinito; para mi marido, dulces, y los tamales tradicionales, para todos”, agregó.

Así mismo, en el panteón municipal de Querétaro, ubicado en la colonia Cimatario, la señora María llevó una grabadora para reproducir las canciones que más le gustaban a su tía Carmela Rivera, quien tiene cuatro años de fallecida. También colocó un ramo de rosas blancas, que eran sus favoritas.

“Mi tía fue como una madre para nosotros. Ya tiene cuatro años que falleció, pero no olvidamos el amor y el cariño que nos dio durante toda su vida. Sus sobrinos fuimos los hijos que nunca tuvo”, subrayó.