El vocero de la Diócesis de Querétaro, José Martín Lara Becerril, reconoció que urge atender los delitos de la violencia, en todas sus expresiones, la corrupción y la impunidad
Luego de que este martes 22 de marzo el Poder Ejecutivo, encabezado por el gobernador del estado de Querétaro, Mauricio Kuri González, presentó el paquete de reformas para la seguridad y justicia de la entidad; el vocero de la Diócesis de Querétaro, José Martín Lara Becerril, reconoció que urge atender los delitos de la violencia, en todas sus expresiones, la corrupción y la impunidad.
“Urge atender la violencia en cualquiera de sus formas. La violencia en el seno familiar, la violencia en el barrio, en la calle; que implica una falta de respeto grave a una persona y máximo cuando los delitos se cometen en contra de los que son más vulnerables. La corrupción es como un cáncer que va desgarrando la sociedad, es otro de los males que tiene que atenderse de manera prioritaria, así como la impunidad que va muy ligado con el tema de la justicia”.
En ese sentido, el también vicario general de la Diócesis dijo que si bien en la experiencia no se ha podido comprobar que al endurecer las penas para castigar algunos delitos ayude a disminuir la criminalidad, estas funcionan como una medida desalentadora para el “agresor”.
“Si tu cometes un delito vas a tener esta pena, entonces sirven en primer lugar para desalentar al agresor y una vez que se ha infringido sirve como castigo; o sea, funcionan como medidas desalentadoras, por ejemplo, si tu ves que tu vecino cometió un delito grave, que inmediatamente lo agarraron, lo sancionaron y tiene una pena ejemplar pues entonces eso evidentemente que ayuda a cuestionar a los demás que están en la misma línea a no cometer los mismos delitos”.
Finalmente, el vocero de la Diócesis de Querétaro resaltó que para solucionar los delitos de fondo hay que tomar otras estrategias, por ejemplo, la formación de los valores desde el seno de la familia: “Cuando hay un mal social hay que atender la raíz de aquello que está dañando a la sociedad y lo que está ahí al fondo de todo es la familia, ya que ahí se genera todo, porque en la familia nosotros nacemos, crecemos y es donde se forman a los menores hacia el futuro ciudadano que después van a ejercer”.